El Parlamento canario rechaza un pacto contra el racismo y la xenofobia

El pleno del Parlamento de Canarias ha dicho no a la iniciativa socialista. El pacto propuesto desde las filas del PSOE intentaba promover la firma de un pacto contra el racismo y la xenofobia, ante la situación creada por la llegada de inmigrantes en los últimos meses.

La llegada de cayucos ha dividido al Parlamento canario a la hora de abordar la problemática de la inmigración. El pacto socialista ha sido calificado desde las filas populares como un intento de "vender humo de la hoguera del buen rollito del baboso talante", según Cristina Tavío, diputada del PP. En la misma línea se ha mostrado Coalición Canaria, su portavoz José Miguel González cree que se trata de "un puro intento de manipulación de la opinión pública".

El grupo socialista había planteado dicho pacto ante el peligro que ve en la proliferación de mensajes ultraderechistas contra una supuesta "invasión" de inmigrantes y la convocatoria de manifestaciones, que en su opinión fomentan la intransigencia. Por ello instaban al Gobierno canario a promover "la firma de un pacto global de carácter institucional, político y social contra la xenofobia y el racismo".

Evitar manifestaciones ultraderechistas

Uno de los motivos, por los que el PSOE decidió proponer este pacto, ha sido la convocatoria de manifestaciones de carácter ultraderechista. La diputada socialista, Manuela Armas, ha recordado que el pasado mes de octubre ya hubo manifestaciones de este calado, y ha advertido que hay otra convocatoria prevista para el próximo domingo. Esa manifestación ha sido convocada por representantes vecinales y la asociación Identidad Canaria, que demandan medidas de control ante el aumento de la población.

Además, la diputada socialista ha asegurado que "la inmigración es un fenómeno imparable mientras haya hambre y miseria", por eso se deben "establecer la bases para que Canarias no caiga en el error de otros países", en clara referencia a movimientos ultraderechistas que han proliferado en otros países.

Sin embargo, los representantes de Coalición Canaria y el Partido Popular centraron sus discursos en reclamar cambios en la política de inmigración del Gobierno socialista, y aclarar que en Canarias los movimientos ultraderechistas no existen. Por ello la diputada del PP, Cristina Tavío ha manifestado que aclarar la propuesta del PSOE sería como "respaldar una línea marítima a la mítica isla de San Borondón".

Para Tavío el racismo y la xenofobia no existe en Canarias, puesto que Canarias ha recibido más de 28.000 inmigrantes irregulares, en poco menos de un año. Para la diputada popular "la sociedad canaria ha estado tranquila, serena y sosegada".

Cristina Tavío ha descartado firmar cualquier pacto contra la xenofobia, y en todo caso si hay que firmar algo que sea "un pacto contra la socialistofobia", que ha definido como "el miedo a las políticas socialistas" porque, en su opinión, "no hay una persona en Canarias que las apruebe", excepto Paulino Rivero, el Presidente de Coalición Canaria, solamente cuando está en Madrid.

Coalición Canaria empezó el debate con la idea de abstenerse en la propuesta, pero decidió votar en contra, según ha explicado su portavoz, José Miguel González, a la vista de que no fueron admitidas sus enmiendas. A su vez, González ha matizado que los socialistas intentaban "desviar la atención" en "un puro intento de manipulación de la opinión publica".

El diputado del grupo Mixto Celso Betancor, a pesar de que ha apoyado el pacto, ha criticado los planteamientos "retóricos y mediáticos" que olvidan "ir al problema", que es "la poca eficacia de las soluciones propuestas y el olvido de Europa ante este problema".