El Congreso aprueba la Ley de Capitalidad de Madrid con la sola oposición de Izquierda Unida

El Pleno del Congreso de los Diputados aprobó hoy, con los votos a favor de todos los grupos políticos excepto Izquierda Unida, el Proyecto de Ley de Capitalidad de Madrid, que será remitido al Senado para que obtenga el visto bueno definitivo. La nueva norma no incluye el aumento de la financiación para la ciudad.

El debate en la Cámara Baja comenzó pocos minutos después de las ocho de la mañana, con escasa presencia en el hemiciclo. Quienes no faltaron fueron el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón; y las portavoces municipales del PSOE, Trinidad Jiménez, e IU, Inés Sabanés.

El texto del proyecto de Ley de Capitalidad fue defendido por el el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, quien la calificó como "necesaria" para dar solución a problemas determinados que afectan a una gran ciudad como Madrid que es, además, la capital de España.

Es "imprescindible" que se dote a esta urbe de una gestión diferenciada, en función de la complejidad de los distintos factores que singularizan a Madrid, ha explicado Sevilla. "No es una cuestión de privilegio o diferenciación respecto a los demás municipios, sino por la evidencia de que los madrileños han de afrontar dificultades culitativa y cuantitativamente distintas", matizó. Entre estas necesidades está, según el ministro, "el flujo constante de ciudadanos de toda España que acuden a esta ciudad por motivos laborales, admninistrativos o económicos".

Izquierda Unida, en contra

En el transcurso del debate parlamentario, todos los grupos con representación en el Congreso votaron a favor de remitir el texto al Senado para su aprobación definitiva, salvo IU-ICV, cuyo diputado Ángel Pérez calificó la inciativa como "una oportunidad perdida", argumentando que "no aporta nada sustantivo que conduzca hacia la mejora política, social e institucional de Madrid".

Pérez consideró que le ley se sumerge en la organización administrativa del Ayuntamiento "pero se desentiende del fin básico que debiera ser la ciudad". "No hay incremento de recursos y las competencias que se trasmiten son insuficientes. En definitiva, no hace falta un proyecto como éste para decirnos algo que ya sabemos desde hace tiempo: que Madrid es capital y que quien manda en la ciudad es el alcalde", sentenció.