Maragall pide por carta a los militantes del PSC que se movilicen en defensa del nuevo Estatuto

El presidente de la Generalitat, el socialista Pasqual Maragall, ha remitido una carta a militantes y simpatizantes de su partido, unas 40.000 personas, en la que solicita su apoyo y movilización para lograr la aprobación del nuevo Estatuto porque, tras las vaciones, "llegará la hora de la verdad".

A ellos les reclama que, durante las próximas semanas, sean "activistas de Cataluña". "Sé que quieres hacerlo y que sabrás hacerlo", indica Maragall antes de pedirles que ejerzan de portavoces de las propuestas del PSC "con la familia y los amigos, con los compañeros de trabajo, con la gente que crea opinión en tu entorno, con la gente de los sindicatos y de las asociaciones.¡Por todas partes!".

"Nadie entendería que desperdiciáramos esta oportunidad", insiste el presidente catalán en un correo electrónico. "Necesito vuestra ayuda, compañeros y compañeras", porque "el Estatut del siglo XXI no será posible sin tu compromiso".

Críticas a CiU y ERC

En la misma carta, el presidente catalán lamenta que en el tramo final del debate estatutario en el Parlamento, a finales de julio, "determinadas posiciones de partido se han impuesto por encima del gran acuerdo de lo que conviene a Cataluña". En este sentido, reprocha que "algunos han olvidado, espero que transitoriamente, que ahora no toca hacer un Estatut de ningún partido, sino el Estatut de todos, un nuevo instrumento al servicio de todos los ciudadanos y ciudadanas de Cataluña", en referencia a la posición de ERC y CiU de que el texto recoja un reconocimiento a los derechos históricos de Cataluña, a lo que se oponen los socialistas.

"En el mes de septiembre -continúa Maragall- hemos de enderezar esta situación y llegar a un texto que pueda ser suscrito por todos los partidos y que despliegue todas las posibilidades federales de la Constitución". El presidente de la Generalitat considera que "ésta será la mejor garantía del pleno autogobierno de Cataluña. De esta manera podremos avanzar" y "sólo así daremos el gran salto adelante que todo el mundo espera, en términos de competencia y recursos, de poder y de dinero al servicio de las políticas sociales a las que los catalanes y la catalanas tienen todo el derecho".

"Nunca en los últimos 25 años, y quizás nunca antes -afirma Maragall- Cataluña había dispuesto de una oportunidad tan abierta, de una mayoría catalanista de izquierdas tan decisiva, de una oposición que también ha hecho bandera de la aprobación del nuevo Estatut, y de un Gobierno amigo en España, presidido por una persona que entiende, respeta y estima a Cataluña, y que defiende la España plural".

En otro momento, Maragall apela a "los sueños" de destacados militantes socialistas catalanes ya desaparecidos, como Joan Reventós, Ernest Lluch, Josep Pallach, Maria Aurelia Campmany, o de su propio padre, Jordi Maragall, para implicar a los destinatarios de la carta en la difusión del mensaje de que el Estatut será "un instrumento útil para mejorar el país y hacer avanzar la justicia social".

La misiva finaliza indicando que "los socialistas y ciudadanos por el cambio que forman parte de los gobiernos catalán y español, y los que nos representan en los parlamentos catalán, español, europeo y el Senado están plenamente volcados en conseguir una gran victoria: la de abrir el siglo con un Estatut digno del pueblo de Cataluña", tras lo que, exclama Maragall: ¡No nos puedes fallar".