El PP califica de "penosa" la gestión de Interior

El portavoz del PP en la comisión de Interior del Congreso, Ignacio Astarloa, ha calificado de "penosa" la gestión del Ministerio de Interior en el caso Roquetas. En su turno de intervención durante la comparecencia de José Antonio Alonso en el Congreso, Astarloa ha reprochado la ausencia de explicaciones de Interior desde que se produjo el suceso, el 24 de julio, hasta el 3 de agosto, cuando hizo las primeras declaraciones y la descoordinación posterior, que le lleva a concluir que existe un "descontrol gravísimo" en el Ministerio del Interior, por lo que ha pedido al ministro que "se vaya a casa".

Astarloa ha citado un editorial, "el suave", publicado en EL PAIS, que hablaba de la "incomprensible falta de reflejos" del Gobierno ante el caso. Para el portavoz del PP, es más grave ese "periodo de oscuridad" en la que no aparecen los responsables del Gobierno, habida cuenta de que, como ha informado Alonso en su intervención, conocía los hechos en detalle desde el día 26, cuando le informó el delegado del Gobierno en Andalucía del contenido del segundo informe interno de la Guardia Civil.

Según Astarloa, finalmente el 3 de agosto "aparecen ustedes como campeones de los derechos humanos", "no porque pase nada nuevo, sino porque aparece el presidente del Gobierno, que ordena cosas al ministro del Interior y al de Defensa". Además, ha dicho el portavoz popular, esas primeras intervenciones fueron "máximamente erráticas", hasta que el Alonso anunció que comparecería cuando recabara todos los datos pertinentes. En este sentido, se ha preguntado Astarloa "qué hecho nuevo esperaba el ministro si los últimos datos que se conocen son los del informe del día 26 de julio". Así, ha dicho que "lo único" que ha hecho el Gobierno ha sido "escurrir el bulto, ya que decir que mira hacia otro lado es un eufemismo".

Astarloa se ha preguntado también "qué pasa en el Ministerio del Interior" para que tenga que ser el delegado del Gobierno en Andalucía y no el director general de la Guardia Civil, Carlos Gómez Arruche, el que informe al ministro del suceso de Roquetas. "¿No habla usted con el director de la Guardia Civil?", ha preguntado Astarloa. Además, cuando finalmente habla Arruche, lo hace, según el portavoz popular, en "sentido contrario" a las instrucciones recibidas de Alonso y luego "calla". Así, ha concluido que existe un "descontrol gravísimo en el Ministerio del Interior".

Críticas a Arruche

Por su parte, la representante de IU-ICV, Carme García, ha instado al ministro a decir si cree que el director general de la Guardia Civil debe seguir en su cargo tras haber "minimizado" el suceso de Roquetas y de desatender "gravemente" a la familia del fallecido en su cuartel, que fue víctima de un comportamiento "desproporcionado y violento" de un grupo de agentes cuando lo que esperaba era ayuda. No obstante, ha deseado que esta muerte "sirva al menos para ver si en estos momentos la Guardia Civil recibe la formación y los recursos adecuados".

Mientras, el portavoz de CiU, Josep María Guinart, ha advertido del posible efecto de "desmoralización" e "inhibición" de la Guardia Civil si se hace un uso partidista del suceso de Roquetas, por lo que ha pedido un "especial apoyo" para el cuerpo en esta "crisis". Igualmente, se ha declarado "avergonzado como ciudadano" ante este caso "gravísimo", que, no obstante, "no debe mermar la confianza en la Guardia Civil" y en otros cuerpos de seguridad, que abordan "miles de problemáticas cada día". Además, ha dicho que es competencia del ministro del Interior decidir si Arruche debe seguir en su puesto, y ha abogado por la desmilitarización de la institución.

Sí la ha pedido abiertamente Emilio Olabarría, portavoz del PNV, que entiende que "en el siglo XXI no puede ser un cuerpo militar", porque eso supone uno de los "déficit democráticos" del país. Además ha instado a un pacto para erradicar los malos tratos y la tortura en dependencias policiales. No obstante, no ha pedido dimisiones, ya que "es precoz y una frivolidad, porque la información no ha fluido con suficiente abundancia". Según Olabarría, casos como el de Roquetas "no son tan esporádicos", citando informes de Amnistía Internacional y de otros organismos que aseguran que desde 1995 sufrieron malos tratos 320 personas y 20 murieron "en custodia policial" en España. Por ello, ha pedido un pacto para acabar con los malos tratos. Mientras, la portavoz de EA y del Grupo Mixto, Begoña Lasagabaster, ha pedido "una reflexión global" que evite las torturas y malos tratos a los detenidos en dependencias policiales, al tiempo que ha denunciado la pasividad del director de la Guardia Civil pese a que tuvo conocimiento de los hechos.

Finalmente, el portavoz de ERC, Agustí Cerdá, ha asegurado que la gestión del general Arruche "casa poco" con la política de "tolerancia cero" a la vulneración de derechos anunciada por el ministro en su intervención. Según Cerdá, "no gustaron las primeras manifestaciones" de Arruche sobre el caso ni sus "últimos silencios". En todo caso, no ha pedido dimisiones porque contribuirían a "oscurecer la investigación" y no ayudarían en absoluto a erradicar los casos de tortura que, a su juicio, se siguen cometiendo en dependencias policiales españolas.