Las constructoras afirman que pidieron que se reforzaran los túneles del barrio del Carmel

Las constructoras de las obras del metro en el barrio barcelonés del Carmel afirman que, tras producirse algunos desprendimientos, solicitaron el refuerzo de los dos túneles, en concreto la instalación de lo que en términos técnicos se conoce como un "paraguas pesado", según informa la Ser. Sin embargo, según las fuentes del sector consultadas por esta cadena, la dirección de la obra rechazó la petición alegando que no estaba dispuesta a pagar el coste del refuerzo.

En la reunión mantenida entre las constructoras -una Unión Temporal de Empresas (UTE) que agrupa a FCC, COMSA y COPISA- y la dirección de obra después de producirse los desprendimientos, estas constructoras aseguran que solicitaron el refuerzo de los dos túneles. En concreto, pidieron la instalación de lo que en terminos técnicos se conoce como un "paraguas pesado", es decir, la implantación de bulones de hierro a lo largo del túnel. Pero, según las fuentes del sector consultadas por la Ser, la dirección de la obra rechazó la petición alegando que no estaba dispuesta a pagar el coste del refuerzo.

El contenido de la reunión en la que las constructoras piden el refuerzo está documentada. En concreto, consta en dos actas correspondientes a sendas reuniones y estan firmadas por representantes de la UTE que construye el túnel y por la dirección de las obras. Hay que recordar que la dirección de las obras la lleva otra UTE, otro conjunto de empresas a quien la Generalitat encargó la dirección y seguimiento de las obras. Las mismas fuentes aseguran que normalmente la dirección de la obra debe trasladar este tipo de peticiones a Gisa, la empresa pública de la Generalitat que hace las grandes obras en Cataluña.

El tunel, sellado

En relación a esta información, un portavoz de la Generalitat se ha limitado a señalar que toda la documentación y las actas que obran en poder de la Consejería de Obras Públicas deben ser revisadas y su contenido contrastado antes de dejarlo en manos de sus abogados. Mientras tanto, los trabajos para el sellado del túnel de maniobras de la Línea 5 del Metro de Barcelona han concluido la pasada noche tras haberse inyectado en total 14.700 metros cúbicos de hormigón, según ha informado a pie de obra el gerente de obras de Gisa, Antonio Pérez. Si bien las primeras previsiones hacían referencia a la necesidad de vertir 16.000 metros cúbicos, el material natural del hundimiento ha hecho que se necesiten 14.700.

El sellado de este túnel, cuya excavación originó los desprendimientos y el gran socavón abierto en el subsuelo del barrio del Carmel, ha concluido antes de lo previsto, ya que en principio se esperaba que finalizara mañana. El hormigón se introdujo en la cola del túnel de maniobras, de unos 120 metros de largo, mediante cinco puntos verticales y dos horizontales. Pérez ha afirmado que la zona del hundimiento "está estabilizada" durante una visita guiada a las obras del túnel de la futura estación del Carmel de la Línea 5 de Metro. Por primera vez, los periodistas han podido acceder dentro del túnel. La visita ha comenzado en la plaza Pastrana, donde se habilitará el vestíbulo de la estación del Carmel y continuó hasta el túnel de maniobras.

Preguntado por cuándo podrán volver las familias a sus casas, ya que la Generalitat afirmó que esta medida se tomaría después del sellado del túnel de maniobras, Pérez ha señalado que "se está analizando el proceso de vuelta". Fuentes de la Conselleria de Política Territorial y Obras Públicas han subrayado que el retorno se consensuará con los vecinos y con los péritos de éstos. Pérez ha defendido el sellado del túnel de maniobras por ser la forma "más rápida y más segura" de consolidar el terreno "para que la gente pueda volver tranquila a sus casas". Los trabajos en el túnel se completan ahora con el rellenado de la zona del derrumbe, el único lugar en el que todavía se registran aún movimientos de tierras por asentamiento.