La DGT lanza una campaña contra el móvil y avisa de que cuadruplica el riesgo de accidente

En 2004 ocurrieron en España 3.038 accidentes mortales en carretera que causaron la muerte a 3.516 personas y heridas a otras 3.000. En un 27% la distracción fue el factor desencadenante, una circunstancia a la que contribuye el uso de teléfonos móviles mientras se conduce. Contra esta práctica, que cuadruplica el riesgo de accidente, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha lanzado una campaña que incluirá 100.000 controles por parte de la Guardia Civil entre el 14 y el 18 de febrero.

La campaña, también divulgativa, incluye emisión de cuñas informativas en radio y mensajes en los paneles de información en carretera con el slogan Conducción…las llamadas pueden costar vidas. Según un estudio epidemiológico realizado en Toronto (Canadá) con 700 conductores involucrados en accidentes de Tráfico el riesgo de sufrir un accidente mientras se usa un móvil puede ser equiparable a conducir con una tasa de alcohol en la sangre de 1 gr/l.

El problema se agrava porque un alto porcentaje de conductores -entre un 30% y un 50%, según fuentes de la DGT no percibe el riesgo que supone hablar por teléfono mientras se conduce. Por ello Tráfico pretende realizar una campaña de sensibilización en varias direcciones: disuadir a los conductores de llamar o responder el teléfono, disuadir también a quienes pretenden realizar una llamada a quien se sabe que va conduciendo, mentalizar a los peatones de que el uso del móvil también puede distraerlos de los riesgos viales etc.

Las cifras demuestran lo extendido de esta peligrosa práctica. Según un estudio reciente de la DGT, más de un 30% confesaba esta práctica. Y en 6 de cada diez casos el aparato más utilizado era manual, el más peligroso. Sólo un 14% era manos libres. Otras fuentes de investigación coinciden en los datos y señalan que, en números, absolutos y como media, que más de 3.300.000 conductores usan el móvil cuando conducen.