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Marín acusa al PP de preparar en el pleno de ayer "una emboscada parlamentaria"

El presidente del Congreso denuncia una política de trinchera en la comisión del 11-M

El presidente del Congreso, Manuel Marín, ha advertido esta mañana que de la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial lo único que va a exigir, porque es su "obligación insititucional", es que se tramite sin "la menor sospecha de tacha de ilegalidad". En referencia a la bronca que se produjo ayer en la Cámara, Marín ha asegurado que no tuvo ningún problema en debatir con el portavoz del PP, Eduardo Zaplana, su reprobación pero que no le gustan las "emboscadas parlamenterias".

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Respecto de la amenaza lanzada por Zaplana de presentar una moción de reprobación de no aceptar sus demandas, Marín se ha mostrado "encantado" de bajar de su "pupitre a la tribuna" y de demostrar lo que cree que es "obvio".

En un desayuno convocado por Fórum Europa el presidente de la Cámara Baja ha admitido que la calidad de trabajo de la oposición ha mejorado en esta legislatura, y "esto es incontestable", pero ha advertido de que ello no justifica el gusto por la "emboscada y la escaramuza", que va en detrimento del Parlamento. Marín ha recordado que ha habido muy pocos casos de presidentes del Congreso que han dicho al Gobierno "no, así no", y, por eso, ha añadido, "también se lo digo a la oposición".

La ausencia en la votación

El presidente se ha referido también a las ausencias de 18 diputados del PSOE en el hemiciclo, el día de la votación de la reforma, lo que provocó el rechazo del proyecto de ley. A este respecto, Marín ha entonado el mea culpa porque, según ha dicho, el primero que cometió un error fue él.

El presidente del Congreso ha valorado además el trabajo de la comisión del 11-M y ha dejado entrever su escepticismo ante los resultados que pudiera obtener. Marín ha afirmado que, a su juicio, "el Parlamento español no está en condiciones de resolver cuestiones límite" y cuando se plantean, se suelen "resolver mal". El presidente de la Cámara Baja ha deseado "mucha suerte" al presidente de la comisión, Paulino Rivero, y a los comisionados, pero ha expresado su temor de que "al final el debate político se coma la investigación".

Según Marín ese riesgo se agrava por "la endeblez del Parlamento como instrumento político hacia la sociedad, de poder explicar por si mismo las cosas". En este sentido, ha indicado que tanto los partidos políticos como los medios de comunicación españoles están "en trincheras perfectamente definidas", de tal manera que "por la mañana ya se sabe las conclusiones del día siguiente". En su opinión, eso pasó al juzgar la comparecencia del ex presidente José María Aznar y ocurrirá lo mismo cuando acuda el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

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