Suiza extraditará a España al líder de la célula islamista desarticulada por Garzón
La justicia helvética está pendiente de recibir la orden formal de detención
La justicia suiza extraditará a España a Mohamed Achraf, el presunto líder de la célula islamista desarticulada esta semana por orden del juez Baltasar Garzón y que, según Interior, pretendía atentar contra la Audiencia Nacional u otra sede judicial.
Achraf está en la actualidad encarcelado en Zúrich, según ha informado el Ministerio suizo de Justicia a Interpol, a la espera de que llegue una orden formal de detención del Gobierno español, según ha informado Folco Galli, portavoz de la Justicia suiza. La policía española considera a Achraf el cerebro de la célula islamista desarticulada y, según las investigaciones, reclutó a los activistas en distintas prisiones españolas desde el centro penitenciario de Topas, donde estuvo recluido entre 2000 y 2002.
Achraf, sobre el que pesaba una orden de busca y captura internacional dictada por Garzón, fue detenido en Suiza hace unos días por portar documentación falsa. Las autoridades españolas tienen 40 días para formalizar la orden de detención con vistas a la extradición. No obstante, Suiza ha urgido a España a enviar dicha orden porque Achraf está detenido como inmigrante ilegal y esta detención no puede prolongarse indefinidamente.
Mientras, la operación sigue su curso y han sido interrogados y aislados varios presos de varias cárceles españolas, con los que los activistas podrían haber tenido contacto. El juez Garzón tomará declaración a los detenidos el viernes.
Conexiones internacionales
Tras estas detenciones e interrogatorios, la policía ha comenzado a investigar las conexiones internacionales de la célula islamista. Así, agentes españoles investigan en Australia, Estados Unidos y varios países europeos las posibles conexiones que mantenía la red islamista. En el caso de Australia, la policía del país investiga, a petición de España, a una persona, al parecer de nacionalidad australiana, que habría estado en contacto con la red de activistas islamistas desarticulada en varias ciudades españolas. El director de la policía australiana, Mick Keelty, declaró a la radio australiana ABC que tienen la identidad de la citada persona y que en este momento intentan aclarar si se trata realmente de un australiano o de alguien que ha estado en Australia.
También el Servicio de Inteligencia holandés (AIVD) investiga las conexiones de la célula, según ha informado el portavoz de ese servicio secreto, Vincent van Steen, que ha confirmado que "existe un vínculo con Holanda" de esta red. La investigación en Holanda sigue tres "posibles vías de conexión", según Steen: La primera es que uno de los detenidos en España, el argelino Mourad Yala Abu Anas, había sido previamente arrestado en Holanda por presunta falsificación de pasaportes y vínculos con una red terrorista. La segunda se refiere a que otro de los detenidos, Abdol Ghaffar Hasemi, estaba en posesión de un pasaporte holandés. Por último, se investiga las posibilidades de que el presunto líder de la red haya hecho transferencias de dinero a Holanda y presuntamente también a Bélgica.
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