El Príncipe Felipe: "Soy un hombre feliz, me he casado con la mujer que amo"

"No puedo esconderlo, imagino que salta a la vista. Soy un hombre feliz". Con estas palabras iniciaba el Príncipe su brindis durante el banquete nupcial, en el que ha querido resaltar que su matrimonio había sido fruto del amor ("me he casado con la mujer que amo"), pero también "el gran compromiso personal e institucional" con el que inicia esta nueva etapa de su vida. "Nuestro destino está íntimamente ligado al futuro de los españoles", ha añadido don Felipe.

Minutos después, el Rey pronunció un discurso con el que puso fin al banquete y a las más de siete horas de celebraciones, y en el que pidió a los Príncipes de Asturias que piensen "siempre en España" y dediquen, "con amor y devoción", lo mejor de sus "esfuerzos a los españoles, para aunar sus esperanzas, compartir sus ilusiones y poderos fundir siempre con sus sentimientos".

El Rey se ha mostrado convencido de que a los novios les "anima la pasión de servir a este gran país, diverso y plural, orgulloso de su convivencia en democracia y libertad". Y es que el monarca ha combinado en un discurso emocionado las referencias a la "enorme ilusión" con la que ha vivido toda la familia real el enlace (añadió que su felicidad era enorme, "siempre difícil de contener, como padre pero también como Rey), y las alusiones al papel institucional de la pareja, heredera de la Corona, "símbolo de esperanza, semilla de continuidad dinástica y garantía de estabilidad para la Monarquía Parlamentaria que establece nuestra Constitución".

Antes, el Príncipe también había incidido en la responsabilidad que pesa sobre sus hombros, pero sin olvidar que el enlace es fruto del amor. "Tengo la certeza de que esta condición [de ser feliz] me la da sentir la emoción de ver y protagonizar la realización de un deseo: Me he casado con la mujer que amo. Conjugar la razón con la fuerza del amor y del sentimiento ha sido siempre un objetivo en mi vida"

El heredero de la Corona ha añadido: "El servicio a los españoles es el gran compromiso personal e institucional con el que Letizia y yo iniciamos ahora una nueva etapa en nuestra vida. [...] Aspiramos a fundar una familia. Y queremos alcanzar el necesario equilibrio entre lo público y lo privado, entre las obligaciones —que lo son de por vida— y la legítima y necesaria vida familiar; sabiendo que nuestro trabajo requiere una serenidad, una dedicación, una constancia y una mesura tales que permitan hilar el tiempo político con el tiempo humano".

Luego se ha dirigido a su mujer: "Letizia: hace poco mas de un año dimos los primeros pasos que, con amor y serenidad, nos han traído hasta aquí. No es mucho tiempo ni poco; el suficiente para habernos descubierto mutuamente, con transparencia y sinceridad, como la persona que deseábamos tener a nuestro lado para toda la vida. El conocimiento y respeto recíprocos, nuestra complementariedad y complicidad han ido día a día cimentando lo que con tanta fuerza nos acercó e impulsó para llegar a nuestro matrimonio. Es también muy importante — y tú me lo dices tanto— que sepamos encontrar el uno en el otro el remanso necesario para reflexionar, disfrutar y compartir todo aquello que nos hace crecer como personas, enorgullecernos y sobrellevar la intensidad de nuestras vidas. Y lo es tanto más por cuanto ha de ser fuente de gozo y armonía familiar. Se que lo conseguiremos sin duda".

Y, tras esta declaración de amor, se ha dirigido al Rey para dejar claro que asume sus responsabilidades como heredero: "Majestad: no tengáis ninguna duda de que siempre pensaremos en España y de que toda nuestra vida estará dedicada al bienestar de los españoles". No ha querido terminar el Príncipe sin un recuerdo a las víctimas del 11-M: "M de Madrid, de Mayo y de Memoria; en ella siempre estarán los ausentes, los que no les fue permitida criminal y brutalmente seguir viviendo sus ilusiones y desvelos; y también los que hoy no pueden disfrutar con ellos, libre y cívicamente de la primavera madrileña que nos acoge y nos levanta el ánimo. Con su recuerdo presente, permitidme levantar mi copa por Letizia, por Sus Majestades los Reyes y por España".