Descarrila un tren tras arrollar a un vehículo militar sin causar ni daños ni heridos
Se trata del segundo accidente ferroviario en el que se ven implicados militares en 24 horas
Un tren ha descarrilado esta mañana en la provincia de Guadalajara al arrollar en un paso a nivel a uno de los vehículos militares que hacen la vigilancia de las vías tras los atentados del 11-M. Ninguno de los 42 viajeros del convoy han resultado herido, ni tampoco los soldados, que han logrado salir del vehículo antes del accidente.
Según han informado fuentes de la subdelegación del Gobierno, el descarrilamiento del tren número 7001, que hacía el trayecto entre Arcos de Jalón (Soria) y la estación madrileña de Chamartín, se ha producido a las 7.50 horas entre las localidades alcarreñas de Guadalajara y Fontanar, en concreto en el kilómetro 64,300 de la vía férrea Madrid-Barcelona. El subdelegado del Gobierno, Jonás Picazo, ha explicado que, al parecer, el choque ha tenido lugar cuando el convoy militar realizaba una maniobra en un camino estrecho y deslizante paralelo a la vía, cerca de la localidad alcarreña de Fontanar, y, debido a las últimas lluvias, se ha quedado atascado en una de ellas.
En el vehículo viajaban un sargento y un cabo, que esperaron para abandonar el vehículo hasta el último momento antes de producirse la colisión. Por su parte, un portavoz de Renfe ha explicado que el maquinista ha visto el vehículo pero que no ha podido evitar la colisión. Así, el tren, que circulaba a unos 80 kilómetros por hora, no ha tenido tiempo de frenar. Las mismas fuentes han indicado que el tren, que contaba con unos cuatro o cinco vagones con capacidad para 600 viajeros, ha golpeado al vehículo y lo ha arrastrado unos 200 metros. Como consecuencia del accidente, se ha salido de la vía el primer eje del tren "sin que el primer vagón llegara a descarrilar y no hubo lesionados, ni se produjeron desperfectos en la vía".
Restablecido el tráfico
Los pasajeros del tren siniestrado, algunos muy nerviosos, desorientados y preocupados tras percatarse de lo sucedido, han sido trasladados en autobús a Madrid y la ferroviaria Madrid-Barcelona, que tiene muy poca circulación desde la inauguración del AVE Madrid-Zaragoza, ha tenido que ser suspendida temporalmente a causa del accidente. El tráfico ha quedado restablecido sobre las 10.00 horas.
Se trata del segundo accidente ferroviario en el que se ven implicados militares en 24 horas. La madrugada de ayer, el soldado Israel Gurrea Casado, de 19 años, natural de Logroño, murió cuando el vehículo militar en que viajaba fue arrollado por un tren de mercancías en la localidad zaragozana de El Burgo de Ebro. El accidente se produjo también en un paso a nivel, en este caso sin barreras. El soldado, junto a otros cuatro compañeros, realizaba labores de vigilancia en la nueva línea del AVE que une Madrid a Zaragoza y Lleida. En el accidente, los otros cuatro ocupantes del vehículo militar, un Nissan, resultaron heridos de diversa consideración, aunque no se teme por la vida de ninguno de ellos.
Esta mañana se ha celebrado el funeral por el joven soldado en el recinto militar de la Ciudadela de Jaca (Huesca). El acto, al que han asistido sus familiares, ha estado presidido por el general jefe interino de la Fuerza de Maniobra, Emilio Pérez Alamán. También han asistido mandos y representantes del Ejército y de otros cuerpos de seguridad, así como autoridades civiles de Huesca. Tras la misa oficiada por el capellán castrense, se ha transmitido a la familia y a las Fuerzas Armadas el pésame del obispo de la Diócesis de Jaca, Jesús Sanz Montes, y se le ha impuesto, a título póstumo, la Cruz del Mérito Militar con distintivo amarillo, por muerte en acto de servicio.
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