Fallece el comandante de la Guardia Civil herido en Irak

El comandante de la Guardia Civil Gonzalo Pérez García, herido de gravedad el pasado 22 de enero en Irak al ser disparado en la cabeza, ha fallecido esta tarde, poco antes de las 21.00 en el Hospital Central de la Defensa, donde permanecía ingresado desde el pasado día 23 de enero, según ha informado el Ministerio. El militar ha sufrido esta madrugada "un empeoramiento brusco de su estado neurológico" que le hizo entrar en un estado de "muerte cerebral".

Durante el día de hoy, las noticias sobre su estado han sido contradictorias. Tras conocerse que su estado había empeorado esta noche, después de varios días en un estado de coma irreversible, la Guardia Civil ha informado por la mañana de que el militar había fallecido. Poco después, el Ministerio de Defensa ha desmentido esta información, precisando que había entrado en "muerte cerebral" y que se le consideraba "insalvable". No obstante, hasta última hora de la tarde no se ha certificado su fallecimiento.

Gonzalo Pérez García, de 42 años, resultó herido de un tiro en la cabeza durante una operación contra una banda de delincuentes en Al Hamsa (Irak). El ataque se produjo el 22 de enero y, desde entonces, el comandante se encontraba en un estado de coma irreversible.

El comandante de la Guardia Civil ahora fallecido trabajaba como asesor de seguridad de la Brigada Plus Ultra II en Irak. La operación en la que resultó herido se produjo a 40 kilómetros al sur de la base principal de las tropas españolas. En aquel momento, Pérez García fue trasladado a Irak, donde fue atendido en un hospital militar estadounidense. Después, el comandante fue trasladado a Kuwait y, desde allí, al Hospital Central de la Defensa en Madrid.

La operación se realizó en colaboración con la policía iraquí. Pérez García participó en el registro de una vivienda y, al salir del inmueble, varias personas le dispararon desde el interior de un coche. Una de las balas impactó en la frente del comandante y se alojó en el cerebro.

Gonzalo Pérez García, casado y con tres hijas, era un experto en criminalística y balística. El comandante, nacido en Toledo, estuvo destinado en la Comandancia de Madrid y pasó un tiempo en el cuartel donostiarra de Intxaurrondo, donde trabajó a las órdenes del general Rodríguez Galindo. Dentro de la Guardia Civil destacó por inventar el Servicio Integral de Vigilancia Electrónica (SIVE).