Palacio aborda con Bremer en Bagdad una "nueva etapa" de la reconstrucción de Irak

La ministra española de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, ha abordado a primera hora de la tarde en Bagdad con el jefe de la Administración Provisional de Irak, Paul Bremer, la "nueva etapa" en la que entró la reconstrucción del país a partir de la conferencia de donantes de Madrid.

"El éxito de la conferencia hace que podamos hablar de una nueva etapa y distinta en la reconstrucción de Irak, en un contexto de la seguridad difícil al que tenemos que enfrentarnos", ha indicado Palacio tras la reunión de 50 minutos que ha mantenido con Bremer en el cuartel general de la coalición. Palacio -que se encuentra desde ayer en Irak acompañada del nuevo encargado de negocios, Marcos Vega, quién a partir de hoy es el jefe de la misión diplomática española- ha indicado que el "desde el éxito de la conferencia, el futuro de la reconstrucción de Irak tiene una proyección ya concreta en cifras", que ha abierto la vía para que la sociedad participe de forma activa.

En relación a los españoles que efectúan diversas tareas para la Administración Provisional, Palacio ha explicado que España renovará el equipo de personas de acuerdo a las necesidades de esta "nueva etapa". "He reiterado la profunda gratitud de la coalición por la contribución militar y civil de España, que será mayor a medida que transcurran los días", ha indicado por su parte Bremer.

"Una gran cancillería"

Por la mañana, la ministra ha ofrecido una conferencia de prensa junto a su homólogo iraquí, Hoshyar Zubair, en la que ha declarado que su presencia en este país responde al interés de españa en "respaldar al pueblo, el Gobierno y las instituciones de Irak". Las instituciones iraquíes -nombradas por los estadounidenses- "encarnan en este periodo de transición la soberanía de Irak", ha afirmado la ministra, quien ha asegurado interpretar así "el lenguaje de las resoluciones de la ONU".

Palacio ha manifestado que confía en que la nueva cancillería española en la capital iraquí sea operativa "en un futuro muy próximo", al tiempo que ha anunciado que España "tratará de tener mayor presencia en Bagdad", en referencia a la última reducción del personal español en Irak. Salvo el ex encargado de negocios, Eduardo de Quesada, y el primer secretario, Pablo Rupérez, así como algún miembro del personal auxiliar, los funcionarios que prestaban servicio en la Embajada de España en Bagdad fueron trasladados de forma gradual a Amán, la capital de Jordania, debido a que el edificio no ofrecía garantías de seguridad.

En este sentido, la ministra ha pedido a su homólogo iraquí ayuda para poder acabar cuanto antes las obras del nuevo edificio de la Embajada española, que "será una gran cancillería", y que el Gobierno ha elegido porque reúne mejores condiciones de seguridad que la anterior. Sobre la ola de atentados, Palacio ha señalado que "los terroristas nunca conseguirán sus fines", y se ha mostrado convencida de que "los terroristas, entre los que están los nostálgicos del régimen depuesto, lo único que persiguen es crear el caos". Por su parte, Zubair ha dado las gracias al Gobierno español y ha añadido que la reciente Conferencia de Donantes celebrada en Madrid "fue un éxito, y fue muy importante porque significa que Irak no está solo".