El reparto de poder en la Unión Europea separa a España de Alemania
Schröder y Aznar apuestan por "mirar hacia adelante" en la crisis de Irak y por una salida democrática
El presidente del Gobierno español, José María Aznar, ha subrayado esta mañana que el único "punto de divergencia" en política europea que le separa del canciller alemán, Gerhard Schröder, es el reparto del poder institucional entre los Estados de la Unión Europea (UE), si bien ambos han confiado en alcanzar un consenso antes de fin de año.
En el II Foro hispano-alemán sobre el futuro de la UE celebrado en Berlín y en una posterior rueda de prensa conjunta, Schröder ha reafirmado su apoyo a la propuesta de reparto de poder consagrada en el proyecto de Constitución Europea, en abierta discrepancia con Aznar, quien ha defendido la necesidad de aplicar el modelo pactado en el Consejo Europeo de Niza porque es "el único" que ha logrado "consenso". En este contexto, Schröder ha advirtido a Aznar, de que si reabre en la próxima Conferencia Intergubernamental el debate sobre el sistema de voto, necesitará llegar a un "consenso mejor" que el que se consiguió en la Convención.
Por su parte, Aznar ha criticado a la Convención por haber ido "más allá" del mandato que se le otorgó en la cumbre europea de Laeken al reabrir el "equilibrio institucional" que los Quince acordaron en Niza. En todo caso, Aznar ha considerado esencial el cumplimiento de los requisitos de control de déficit que exige el Pacto de Estabilidad y ha deseado en este contexto una "rápida recuperación" de la economía alemana por el bien de toda la UE, sobre las bases del conjunto de reformas impulsadas por Schröder con el nombre de Agenda 2010. Además, Aznar ha propuesto que el próximo Consejo Europeo aborde los problemas de desabastecimiento eléctrico en algunos países de la UE y que provocan apagones como el de Italia.
"Un pilar europeo" en la OTAN
Sobre la crisis de Irak, ambos mandatarios han coincidido en la necesidad de "mirar hacia adelante y no hacia atrás", en alusión a las diferencias producidas en el seno de la UE sobre la intervención militar, al tiempo que han apostado por la colaboración internacional para facilitar cuanto antes una salida democrática en este país. Aznar ha señalado que España y Alemania abogan también por contribuir con sus aportaciones a que el pueblo iraquí tenga una estabilidad económica. En política de defensa, el canciller ha insistido en la necesidad de crear "un pilar europeo propio en el marco de la OTAN" y Aznar ha precisado que esta iniciativa no debe servir para "competir" con la Alianza Atlántica.
Una muestra del momento "muy saludable y muy sano" por el que pasan las relaciones hispanogermanas -en palabras del portavoz de Exteriores del PP en el Congreso de los Diputados, Gustavo de Arístegui- son las bromas que se han gastado Aznar y Schröder durante la rueda de prensa. Aznar ha señalado que la minicumbre ha sido "una reunión entre antiguos amigos que pueden discutir y no tener la misma opinión en un gran ambiente de cordialidad" y, sobre las supuestas tensiones entre él y su anfitrión, se ha mostrado convencido de que cuando abandone la Presidencia del Gobierno ya nadie se acordará del tema. Al oír estas palabras, el canciller alemán ha intervenido para decir riendo: "Espero que la relación conmigo no sea el motivo por el que te vas".
Aznar, que se encuentra desde anoche en Berlín para una visita de menos de 24 horas, ha inaugurado a mediodía la rehabilitada nueva sede de la Embajada española en Berlín y ha emprendido el viaje de regreso a España. Ambos mandatarios cenaron anoche para analizar diversas cuestiones de carácter internacional y vieron juntos la segunda parte del partido Oporto-Real Madrid. La reunión entre ambos duró poco más de dos horas y media, después de que el canciller alemán recibiera a su homólogo español en la explanada de la Cancillería y bromeara sobre la mano derecha lesionada de Aznar.
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