Cuatro días seguidos en una montaña rusa

Un paseo en montaña rusa suele durar apenas un minuto o dos en la mayoría de los parques de atracciones, y pese a ello siempre hay quien se marea, aunque sin duda lo más pesado del asunto sea las largas colas, de incluso más de una hora, que hay que esperar por lo general para esos instantes de emoción. Sin embargo para muchos el viaje se hace corto, así que no serán pocos los que envidiarán a un estadounidense que ha convencido a un parque de atracciones alemán para que le deje montar en su montaña rusa una y otra vez. Ya lleva cuatro días sin parar.

Richard Rodriguez, de 42 años, quiere batir el récord del mundo de permanencia en una montaña rusa en marcha, que dos japoneses habían dejado en 35 horas y media. El estadounidense ya ha superado la marca, pero no está dispuesto a bajarse por el momento. "Aún no ha vomitado ni una vez", ha declarado un responsable del Holiday Park, el parque de atracciones en el suroeste de Alemania en el que Rodriguez ensaya su gesta.

De hecho, por ahora el único problema del estadounidense es que sea ha quemado con el sol, poca cosa teniendo en cuenta que tiene que comer, dormir y evacuar sus necesidades a 120 kilómetros por hora. Eso sí, tiene permiso para descansar 15 minutos cada ocho horas, y por la noche se baja de la montaña rusa Expedition GeForce, de hasta 62 metros de altura, y se monta en otra algo más pequeña para intentar pegar al menos una cabezadita.