El Buque de Greenpeace abandona el puerto de Valencia sin pagar los gastos de atraque
La organización ecologista alega que la embarcación estaba retenida contra su voluntad
El buque Rainbow Warrior de la organización ecologista Greenpeace abandonó hoy el Puerto de Valencia, donde permanecía retenido desde que el pasado 13 de junio impidió que un barco cargado con madera procedente de talas ilegales en Africa entrara en las instalaciones portuarias. El barco de Greenpeace no abonó los gastos de atraque en el puerto de Valencia.
La salida del Rainbow Warrior se produce después de que Greenpeace haya abonado la fianza de 6.000 euros impuesta por el Ministerio de Fomento, aunque la organización ecologista no ha abonado los 1.200 euros exigidos por la Autoridad Portuaria de Valencia por gastos de atraque en sus instalaciones, según informaron fuentes de Greenpeace y de la dirección del Puerto.
Fomento reclamó inicialmente una fianza de 300.000 euros, cantidad que fue rebajada el pasado viernes a 6.000 euros y que fue abonada ayer por un miembro de Greenpeace en la Delegación de Hacienda de Valencia.
Por su parte, la Autoridad Portuaria pidió a la organización que abonara 1.200 euros por el pago de gastos de atraque en las instalaciones portuarias, aunque Greenpeace se ha negado a hacerlo al considerar que su buque estaba retenido contra la voluntad de la organización ecologista.
Cobrar por el alquiler de la celda
Un portavoz del Puerto explicó que "tal y como recogen las disposiciones vigentes, los barcos que entran en el Puerto están sujetos al pago de unas tarifas". "Ellos sabrán lo que hacen, pero la actuación de la Administración está reglada y se procederá con arreglo a la reglamentación de las tarifas", explicó.
Por su parte, el portavoz de Greenpeace Sebastián Losada explicó que se han negado a pagar la tarifa porque, a su juicio, "estábamos retenidos y sería como si uno estuviera en la cárcel y le cobraran el alquiler de su celda". "La mayor multa es haber estado retenidos aquí durante estos días, cuando teníamos toda una serie de actividades programadas e identificados diversos cargamentos de madera ilegal sobre los que teníamos que hacer un seguimiento", explicó Losada. La organización ecologista continuará ahora su campaña internacional No más madera ilegal.
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