La policía carga con violencia para disolver las protestas contra la guerra en el centro de Madrid

Miles de personas han vuelto a salir a la calle en varias ciudades españolas para protestar contra la guerra de Irak y transmitir su ira al Gobierno frente a las sedes del Partido Popular. Las manifestaciones más numerosas se han producido en Madrid, donde los agentes antidisturbios han realizado varias cargas y han disparado pelotas de goma para disolver una marcha en el centro de la ciudad.

Las protestas han comenzado a las 19.30 frente a la embajada de Estados Unidos, en la Castellana. Allí, varios centenares de personas, entre ellas el coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, han coreado consignas contra la guerra y el apoyo del Gobierno de José María Aznar a las ofensiva. Decenas de personas han trasladado más tarde la movilización por la avenida, que ha quedado cortada, lo que ha provocado un gran atasco. En la plaza de Colón se han encontrado con un cordón policial que les ha impedido acceder a la calle Génova, donde se encuentra la sede del PP.

Los manifestantes han seguido su camino por la Castellana hasta Cibeles y Alcalá. En esta calle y en los aledaños de la Puerta del Sol han cruzado varios contenedores en la calzada y han prendido fuego a algunos. La policía ha intervenido cargando con porras y pelotas de goma, lo que ha provocado una algarada que ha vaciado el centro de la capital, según ha informado informado Fernando Pérez. Entre 4.000 y 5.000 personas han participado en esta protesta, y más de medio centenar han resultado heridas de carácter leve, entre ellos cinco policías.

En Sevilla, varios centenares de personas han formado una cadena humana entre la sede del PP y el consulado americano; frente a las oficinas de ese partido en Barcelona se han reunido un millar de manifestantes, y otras 3.000 han protestado contra la guerra y la posición del Gobierno en Oviedo.