El Gobierno destinará al menos mil millones para paliar el vertido del 'Prestige'

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha informado hoy, durante su comparecencia ante la comisión de Economía del Congreso, de que el Gobierno destinará un mínimo de mil millones de euros, entre lo gastado en 2002 y lo previsto para el 2003, para hacer frente a los efectos del vertido del Prestige.

El pasado sábado el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, anunció que los gastos de recogida de fuel en el mar y en tierra se situarían aproximadamente en esa cantidad, entre los 950 y los mil millones. Sin embargo, en esta cifra no estarían incluidas ni las ayudas a los afectados ni los costes de los trabajos en el lugar del hundimiento.

Montoro ha señalado que 500 millones se destinarán a limpieza del mar, 350 a recuperación ambiental del litoral, 75 a las Islas Atlánticas y 75 a acciones complementarias. El titular de Hacienda ha precisado que esta cantidad es un cálculo inicial, que podrá aumentar y que no incluye el coste del sellado definitivo de las grietas del barco hundido para evitar nuevas fugas de combustible.

Nuevos créditos

Por otra parte, la Comisión Delegada para Asuntos Económicos aprobará mañana dos nuevas medidas dirigidas a los afectados, encaminadas a la reestructuración de créditos de las empresas afectadas y sufragar los gastos de las cofradías, según ha anunciado hoy el ministro de Economía, Rodrigo Rato.

El ministro, que se ha reunido con representantes de los sectores económicos afectados de la comarca de Bergantiños, en la Costa de la Muerte, ha explicado que estas medidas se concretarán en la aprobación de una línea de crédito de cuatro millones de euros del Instituto de Crédito Oficial (ICO).

Esta línea de crédito sufragará los gastos de funcionamiento en los que están incurriendo las cofradías de pescadores y que supondrán subvenciones a fondo perdido o créditos a largo plazo con interés cero. La otra medida irá encaminada a la reestructuración del pasivo de las empresas que no pueden hacer frente a la devolución de sus créditos, que serán sustituidos o cambiados por otros del ICO.