El Grupo Correo premia la trayectoria política y humana de Adolfo Suárez

El Rey ha entregado hoy el Premio del Grupo Correo- Prensa Española a los Valores Humanos a Adolfo Suárez para distinguir su papel en la transición democrática que culminó en la promulgación de la Constitución de 1978, pero que se inició antes, con el referéndum de la Ley de Reforma Política, hace ahora 25 años.

Durante un acto cargado de emotividad, el monarca ha recordado que "sin su esfuerzo, su abnegación, su lealtad, lo recalco, su lealtad y su patriotismo, España no habría volado tan alto ni tan deprisa".

Don Juan Carlos, acompañado de la Reina, ha presidido la entrega del Premio y en su discurso se ha hecho eco de las palabras de Ortega y Gasset sobre la concordia, de las que Suárez, ha explicado,"es la más atinada ilustración práctica", por su dosificación del riesgo y la prudencia, su intuición en los momentos más difíciles y su seguridaden las circunstancias más ingratas.

El Rey ha indicado que la bondad del proyecto de Suárez y la manera y el modo en que lo gestionó fue el secreto del éxito de aquella etapa en que "España volvió a donde debía".

Esa gestión, en palabras de don Juan Carlos, se basó en la conciliación, el consenso, en el respeto al adversario y en la tolerancia y la pasión por la construcción pacífica del pluralismo.

Un espíritu, ha continuado el Rey, "que fue decididamente compartido y ejemplarmente ejercido por el pueblo español, auténtico protagonista e la transición".

"Llevar a la calle" la Constitución

Al agradecer el Premio, Adolfo Suárez ha abogado por "llevar a la calle" los principios recogidos en la Carta Magna y convertir los valores constitucionales en "hábitos normales de convivencia".

Suárez ha recordado que cuando fue nombrado jefe del Ejecutivo, "en los momentos iniciales de la Transición, cuando se debatía nada menos que el derecho de asociación política de los españoles", ya formuló un propósito esencial por el que se guió su quehacer en el Gobierno: "Elevar a la categoría política de normal lo que en la calle era simplemente normal".

"Hoy, con la experiencia de 25 años de democracia, me atrevo a formular otro propósito para mi ineludible -ha afirmado durante su discurso-. Hay que llevar a la calle los valores de nuestra Constitución; hay que hacer de ellos hábitos normales de convivencia".

El ex presidente Suárez incidió en que, con la Constitución, es posible lograr "una concordia civil llamada España", donde convivan ciudadanos que, por tener diferentes opiniones, creencias o convicciones, "se complementen" entre sí. No obstante, ha tenido palabras para los que, renunciando a su papel de "complementarios", tratan de "destruir los valores democráticos".

"Quienes matan, secuestran y extorsionan, quienes optan por la violencia como método de actuación política, no son nuestros complementarios. Sólo son los destructores de los valores democráticos. El mal que procuran y el daño que infringen, nos lo hacen a todos", ha añadido.

El acto ha contado con la presencia de los vicepresidentes del Gobierno, Mariano Rajoy y Rodrigo Rato, los ministros de Defensa, Federico Trillo, y Portavoz, Pío Cabanillas, la presidenta del Senado, Esperanza Aguirre, el ex presidente de Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, y otros representantes políticos.

Además de los dirigentes del grupo que otorga el Premio, que fue creado en 1996, entre los invitados han estado también los hijos del galardonado, Mariam y Adolfo.