López reconoce que "no ha sido posible la integración" en la nueva ejecutiva
El secretario general del PSE atribuye a los "recelos y las desconfianzas" la falta de acuerdo.-Blanco lamenta que los sectores derrotados no se comprometan con la nueva dirección
El recién elegido secretario general del PSE, Patxi López, ha reconocido que "no ha sido posible toda la integración que deseaba" en la nueva dirección, ya que había "demasiados recelos, desconfianzas y quizás heridas abiertas en un proceso precongresual no exento de errores".
Así lo ha expresado en su discurso de clausura, en presencia del secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, y de todos los miembros del nuevo órgano de dirección del partido.
El nuevo líder de los socialistas vascos ha afirmado que "su voluntad de sumar no ha terminado hoy", porque "trabajará con toda la Comisión Ejecutiva para unir el partido" y "poner el énfasis" en lo que les "une" para "ganar la confianza de todos desde la lealtad a un proyecto compartido".
"Este es uno de los retos más importantes que asumo en este mandato y espero "no defraudar", ha dicho López, quien ha afirmado que la nueva ejecutiva tendrá que trabajar "con lealtad" a la dirección federal y a "los compromisos adquiridos" por él ayer en su discurso de presentación de candidatura, en el que apostó por crear una "alternativa propia", no condicionada por la relación con el PP o el PNV, sino por un "compromiso con la sociedad".
Patxi López se ha dirigido entonces a José Luis Rodríguez Zapatero para decirle que los socialistas vascos están dispuestos a "mantener firmes sus convicciones" y a "defender la libertad" en Euskadi, porque, según ha dicho, su voluntad es la de "liderar, con la ejecutiva federal, una estrategia para lograr un País Vasco en paz y libertad en una España plural y en una Europa unida".
El nuevo líder de los socialistas vascos ha reiterado que "el principal objetivo es acabar con ETA y defender la libertad" y ha vuelto a exigir a "los nacionalistas que aislen a Batasuna ya", formación con la que, a juicio, "no se puede gobernar, ni hacer oposición".
A su juicio, los socialistas vascos han dado en este congreso un "ejemplo más de libertad" y han sabido "sobreponerse" al asesinato del edil socialista de Orio, Juan Priede, y a la "tragedia que supone convivir con el terrorismo", con lo que han dado a ETA la "respuesta adecuada" al ser "firmes y celebrar" este cónclave.
Ha manifestado que existe un "proyecto político claro" que es el que los socialistas deben impulsar, "sin admitir injerencias de nadie que quiera condicionar esta alternativa", al tiempo que subrayó que su agrupación "no perderá ni un minuto más en los debates" impulsados por el PNV sobre la soberanía o el ámbito vasco de decisión.
López también se ha refirido a las declaraciones efectuadas ayer por Jaime Mayor Oreja, quien afirmó que la elección de López obliga al PP a reforzar el papel de alternativa democrática al nacionalismo vasco, y ha asegurado que no permitirá al dirigente popular que "dude o siembre sospecha sobre la firmeza de ningún socialista que se juega la vida" por defender unas ideas, mientras que advirtió al PNV que "no espere un cambio de 180 grados".
López ha terminado su discurso con un grito de "libertad" y con el deseo de que este "clamor retumbe en Euskadi, se oiga en toda España y lo tenga en cuenta Europa".
"No han querido comprometerse"
En el mismo sentido que López, pero con anterioridad, se han pronunciado el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, y el ex presidente de la Gestora del PSE, Ramón Jáuregui. Ambos han coincidido en reconocer que la nueva ejecutiva no ha logrado la integración de los sectores derrotados.
Tras la advertencia lanzada ayer a los sectores de Carlos Totorika y Gemma Zabaleta contra la tentación de no integrarse en la ejecutiva, Blanco ha reiterado hoy que "ha habido una propuesta para que se sumaran a la dirección", pero ha opinado que "no han querido comprometerse" en la ejecutiva del partido.
El dirigente socialista ha afirmado que la composición de la Comisión Ejecutiva "es irrelevante", ya que, a su juicio, "lo importante de este congreso era tener una línea estratégica, una línea política, una apuesta decidida por trabajar por la libertad y la convivencia democrática".
Por su parte, el presidente de la gestora que ha pilotado el PSE desde la dimisión de Redondo, Ramón Jáuregui, ha admitido que "quizás no se ha logrado la integración plena", aunque ha abogado por "intentarlo mañana si hoy no se ha conseguido".
Tras reclamar un margen de confianza para el equipo de Patxi López, ha señalado que "hay que procurar que el trabajo del partido sea el de un partido unido, y quienes no estén en la dirección apoyen a la ejecutiva actual".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.