La policía detona un coche bomba cargado con 50 kilos de explosivos en Gandía

A las cuatro y media de la madrugada, técnicos de desactivación de explosivos (TEDAX) consiguieron, tras dos intentos fallidos, explosionar el vehículo, un peugeot 406 blanco que según pudo saber ELPAIS tenía la matrícula falsificada.

Sobre las 23.30 horas de la noche del sábado se registró una llamada en el diario Gara -la segunda tras la que avisó del coche bomba en Roses-, en la que un comunicante anónimo advirtió de la colocación un segundo vehículo bomba en el hotel Riviera del municipio valencia de Gandía que estallaría a las 0.00 horas.

La explosión, que duró pocos segundos, estuvo acompañada de una fuerte llamarada con mucho humo y afectó a los vehículos aparcados cerca del coche-bomba, hasta el punto de que algunos se han visto incendiados.

Tras la detonación, que no provocó daños personales directos, una unidad del SAMUR tuvo que atender a dos personas que sufrieron un ataque de nervios y a las que fue necesario suministrar tranquilizantes.

La localización de un Peugeot 406 de color blanco y con matrícula de Barcelona doblada, obligó a la Policía Local y Nacional a desalojar cuatro restaurantes, una cafetería, un pub y un edificio de viviendas situados en las inmediaciones de la esquina de la calle Rábida y el paseo marítimo de Gandía.

El anuncio telefónico amenazaba con que el artefacto de la playa de Gandía iba a explotar a medianoche frente al hotel residencia Riviera, establecimiento que se encuentra cerrado y que no abrirá hasta el día 7 de abril, según se indica en el contestador automático del establecimiento.

Operación dirigida por Cotino

La operación estuvo controlada en el lugar de los hechos por el director general de la Policía, Juan Cotino, y el jefe superior del Cuerpo en la Comunidad Valenciana, Segundo Martínez, a quienes acompañó en todo momento la alcaldesa de Gandía, Pepa Frau.

En el dispositivo participaron medio centenar de agentes del Cuerpo Nacional de Policía, de la Policía Local y del cuerpo de especialistas en desactivación de explosivos, con la colaboración de perros adiestrados, bomberos y personal sanitario de la comarca valenciana de La Safor.

En las últimas horas, la Policía Nacional y Local, ayudadas por los Bomberos, han iniciado los trabajos de valoración real de los daños causados por la explosión del vehículo.

Este es el cuarto atentado con coche-bomba que ha resultado fallido desde el fin de la tregua de ETA, el día 3 de diciembre de 1999, tras los desactivados en Neguri (Vizcaya) el 1 de noviembre de 2000, en Sevilla el 31 de diciembre de 2000 y en Madrid el 12 de febrero de 2001.