Las fuertes lluvias provocan el desbordamiento de varios ríos en Castilla y León

Los desbordamientos han obligado en Valladolid al desalojo de viviendas en la zona de Soto de Medinilla, al sellado con sacos de dos colegios y una escuela infantil y ha causado la inundación de garajes, parques y un polideportivo. Además es necesario el uso de lanchas para acceder a algunos inmuebles de la ciudad.

Dos puentes sobre el Pisuerga a su paso por la capital vallisoletana y Simancas se encuentran cortados y ante el desbordamiento del cauce de este río así como del Esgueva.

Fuentes de la Delegación del Gobierno en Castilla y León precisaron que en Valladolid ha sido preciso cortar el tráfico en el puente Mayor, el más antiguo de la capital, ya que el agua ha tapado los ojos de este acceso y para evitar cualquier problema de estructura, lo mismo que ha pasado con el puente de Simancas.

Las fuerzas del orden vigilan desde primera hora de la mañana el resto de los puentes de la capital.

El Centro de Coordinación de Emergencias de Protección Civil de Castilla y León se reunió esta mañana con carácter de urgencia, para adoptar medidas sobre el temporal de lluvia y viento que afecta a la comunidad.

Tendencia a la normalidad

La crecida del río Orbigo mantiene a los más de 12.000 habitantes del municipio leonés de La Bañeza sin agua apta para el consumo.

Sin embargo, la situación general de la provincia de León "tiende a la normalidad, gracias a la bajada del cauce de los ríos, pese a que se mantiene la alerta debido al nuevo temporal que se acerca y que podría prolongarse hasta el viernes", según fuentes de Protección Civil.

El tráfico ferroviario por sus dos vías de la línea Madrid-Irún, a su paso por el punto kilométrico 286, término de Dueñas (Palencia), que ha estado cortado durante la noche a causa de la crecida del río Carrión ha quedado restablecido este mediodía.

Un total de seis trenes de viajeros y otros 30 de mercancías se vieron afectados y los viajeros de Asturias, País Vasco, León y Galicia tuvieron que realizar transbordos entre las estaciones de Venta de Baños (Palencia) y Valladolid, en ambos sentidos, a través de una flota de autobuses contratada por Renfe.

Por otra parte, la crecida del río Duero ha provocado la inundación de terrenos de cultivo y de naves agropecuarias en Toro y Zamora.

El Duero alcanzó esta mañana a su paso por el barrio zamorano de Carrascal el máximo caudal de los últimos años, al llegar a los 1.600 metros cúbicos por segundo.

El río Valderaduey está desbordado en diversos puntos debido a que tiene dificultades para desembocar en el Duero por lo crecido que baja éste.

En cambio el caudal del Ebro, que alcanzó esta madrugada en Zaragoza una altura máxima de 3,90 metros y 1.468 metros cúbicos por segundo, ha comenzado a remitir y, aunque para mañana se espera una pequeña avenida en la capital aragonesa, no se prevén desbordamientos, según la Confederación Hidrográfica del Ebro.

El desagüe del pantano de Riba-roja ordenado anoche por la Confederación del Ebro ha provocado pequeñas inundaciones en Miravet y en otras localidades cercanas a la desembocadura del río.

Se reanuda la búsqueda

Por otra parte, la Guardia Civil reanudó esta mañana la búsqueda del hombre de 59 años que cayó al río Guadaira, a su paso por Coria del Río (Sevilla), el pasado viernes, y que se ve dificultado por el estado del aguas, por su turbiedad y la enorme cantidad de forraje y fango que arrastran por el temporal.

El desaparecido cayó al río Guadaira cuando limpiaba el desagüe de un canal de riego, cuyas aguas le arrastraron, al destaponarlo, hasta el cauce del río, que se encontraba muy crecido por el temporal en el momento del accidente.

Sin embargo, el temporal de lluvia y nieve mantiene sólo dos puertos de montaña cerrados y cortadas tres carreteras de la red secundaria.

Ocho comunidades -Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Castilla y León, Extremadura, Andalucía y Canarias- se mantienen en alerta ante la previsión de abundantes lluvias y fuertes vientos.

La situación de abundantes lluvias y fuertes vientos, que obedecen al sucesivo paso de frentes fríos, seguirán afectando toda la semana a la Península, con especial intensidad a Galicia, Castilla y León, Extremadura y Andalucía, según el Instituto Nacional de Meteorología.