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Cómo transformar su terraza o balcón por muy poco dinero

Estos espacios, aunque sean pequeños, son esenciales desde la pandemia. Sus dueños buscan cómo sacarles partido sin hacer grandes desembolsos

Sandra López Letón
Terraza
Mobiliario de jardín de Leroy Merlín.

Por pequeña que sea y por poco que sea el presupuesto disponible, cualquier terraza o balcón se puede transformar en una especie de oasis en el que escapar de los sinsabores de la ciudad. Estos espacios exteriores ya demostraron su tremenda importancia durante la pandemia y los confinamientos. Sobre todo, para los que no contaban con este remedio. Dos años después, no han perdido fieles.

En torno a 7 de cada 10 viviendas en España cuentan con terraza o balcón, según Ikea. La mayoría de los mortales disfruta de espacios no demasiado generosos. “El 37% tiene terraza con una media de 16,1 metros cuadrados, y el 33% dispone de balcón con una superficie de unos 4,1 metros cuadrados”, señala Manuel Delgado, responsable de interiorismo del grupo sueco. En sus tiendas, el precio mínimo de una solución para un balcón de pequeñas dimensiones, de entre tres y cinco metros cuadrados, con mesa, sillas, sombrilla, textil y jardinería es de 194 euros. Para terrazas de 15 metros cuadrados, que incluyen también comedor y sofá, sube hasta los 600 euros.

No hay por qué hacer grandes desembolsos, sobre todo si el espacio es reducido. En Leroy Merlin recuerdan que “se pueden encontrar conjuntos de silla y mesa desde los 87 euros, apliques para el exterior desde los 20 euros y césped artificial desde los 4,19 euros el metro cuadrado”. Aunque la inversión puede ser incluso más pequeña si se recurre a elementos reciclados, por ejemplo a palets. “Podemos darle una nueva cara a la terraza desde 15 o 20 euros con un palet y un bote de pintura a la tiza o una planta”, añaden en Habitissimo.

La clave para sacar el máximo partido a estos espacios es no llenarlos de muebles inservibles que consiguen empequeñecerlos. “Se buscan espacios funcionales, con líneas limpias, luminosas y que conecten con la naturaleza. Predominan los espacios con muchas plantas que ayudan a crear oasis y lugares de calma en el exterior de la vivienda”, resumen en Leroy Merlin.

El pavimento puede ser cerámico, piedra, césped artificial o madera apta para exteriores. “La madera aporta calidez y es un material aislante”, señala Delgado. Un pack de nueve baldosas de madera de acacia cuesta en torno a los 23 euros. Aunque hay que tener en cuenta las condiciones climáticas del lugar en el que se reside (heladas, temperaturas extremas…). Y el mantenimiento. “La madera se trata con aceites vegetales y necesita ser repintada. Si no queremos estar pendientes, quizá la mejor opción sea usar porcelánicos” reconocen en Habitissimo. Las alfombras de yute y de fibras naturales son tendencia y, además, sirven para aislar del frío y del calor.

Mejor plegable

Lo que no debe faltar en un espacio exterior es un conjunto de mesa y sillas, aunque sean solo dos. Si hay pocos metros, lo más aconsejable es que sean plegables y se gana incluso más espacio si la mesa está fijada a la propia barandilla de la terraza o balcón. Las hay a modo de barra y abatibles. Pueden ser de madera, de acero, de bambú o ratán. Cualquier mueble necesita un cojín. “Los estampados tropicales y colores vivos son tendencia”, afirman en Leroy Merlin.

Imprescindible es la vegetación y en espacios pequeños lo mejor es optar por macetas colgantes, enredaderas o huertos urbanos verticales. Sin olvidar instalar algún elemento de protección solar que, además, aporte privacidad. Los parasoles, por ejemplo, son muy prácticos para balcones y cuestan desde 10 hasta 760 euros. Una opción muy económica y decorativa son las velas de sombreo. Algunas son capaces de bloquear hasta un 90% los rayos ultravioletas y permiten diferentes puntos de anclaje. Las hay desde 45 euros. Luego están los toldos fijos, cuyo precio va desde los 80 hasta los 350 euros.

Terraza de Ikea.
Terraza de Ikea.

En iluminación hay que apostar por las lámparas solares, que cuentan con baterías extraíbles que se cargan con la energía del sol. “La mejor luz es la indirecta y difusa, capaz de crear una atmósfera acogedora y cálida”, dice el responsable de interiorismo de Ikea. Se pueden instalar focos fijos de luz led que marquen el perímetro de la terraza, lo que contribuirá a que el espacio parezca más grande. Hay otras opciones, como las guirnaldas solares o las tiras de led. Si queda espacio se pueden colocar columpios y balancines desde 199 euros. Y si hablamos de áticos con terrazas de hasta 100 metros, se puede pensar en sofás, comedor, huertos, barbacoas o piscinas (siempre que un técnico certifique que el forjado soporta el peso).

Sobre la firma

Sandra López Letón
Redactora especializada en el sector inmobiliario, del que informa desde hace más de dos décadas. Ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en EL PAÍS. Actualmente, escribe en el suplemento de información económica 'Negocios'. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.

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