Renuncia el consejero del Banco de España nombrado por el PP

Fuego amigo. La presión dentro del Partido Popular ha sido demasiada. El recién nombrado consejero del Banco de España, a propuesta del PP y pactado con el Gobierno, ha renunciado al cargo tan solo unas horas después de haberse comunicado la designación en el Consejo de Ministros.

Antonio Cabrales, catedrático de la Carlos III, reunía un currículum académico excelente para formar parte del comité ejecutivo del organismo supervisor. Miembros de la cúpula del PP consideraban que habían elegido a un experto solvente y de probada independencia, en claro contraste con el nombramiento que ha hecho el Ejecutivo: la ex jefa de Gabinete de Nadia Calviño, Judith Arnal.

“Cabrales es un economista de primera división al que le tocaba jugar la Champions”, comentaba un alto dirigente popular. Sin embargo, la noticia de que firmó una carta a favor de la consejera prófuga de la Generalitat catalana Clara Ponsatí cuando se incorporó a su cátedra en la Universidad escocesa de Saint Andrews, que publicó este martes el diario digital The Objective, ha generado grandes críticas internas en el seno del PP. La presión ha sido muy fuerte y, según confirman fuentes gubernamentales y del Banco de España, Cabrales ha decidido presentar su dimisión. “Me cuesta aguantar esto”, ha señalado a personas allegadas.

Cabrales, nacido en Madrid en 1967, firmó en abril de 2018 una carta en la que defendía, junto a un nutrido grupo de académicos, que Ponsatí volviese a su puesto en la Universidad, después de que en octubre de 2017, tras la declaración de Independencia, la consejera catalana de Educación huyese con Carles Puigdemont a Bruselas. Simplemente lo hacía por solidaridad con una compañera de la época cuando trabajó en la Universidad Pompeu Fabra, aseguran personas que lo conocen.

La designación de Cabrales había sido muy bien acogida en el Banco de España porque es considerado un economista de alto nivel técnico. También es uno de los académicos que integró el think tank Fedea cuando lo dirigía Pablo Vázquez, ahora fichado por el PP para ser el director de la Fundación Concordia y Libertad y para dotar al partido de un mayor discurso económico.

Según explican fuentes del entorno del PP, la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, había puesto muchas resistencias a varias de las propuestas de los populares para el consejo del Banco de España. Solo la intervención de Moncloa hizo posible que hubiese un pacto tras todos los problemas vividos con la negociación para renovar el Consejo General del Poder Judicial y el Tribunal Constitucional.

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