El Bundesbank no descarta que Alemania pueda entrar en recesión

La economía alemana podría continuar contrayéndose, lo que situaría a la mayor economía europea en un escenario de recesión en el tercer trimestre, según el informe mensual del Bundesbank publicado el lunes. El PIB germano ya cayó una décima en el segundo trimestre del año hasta junio, bordeando la recesión técnica, tras una década de crecimiento ininterrumpido.

La economía alemana muestra síntomas de falta de dinamismo también en el verano de 2019, según la institución que preside Jens Weidmann. “El conjunto de la economía podría contraerse ligeramente de nuevo”, dice el Bundesbank en su informe. La principal causa es “la caída continuada en la industria”, aseguró el banco central.

La fuerte exposición de la economía alemana, enfocada a la exportación, la convierte en especialmente vulnerable en periodos de turbulencias externas como el actual. La guerra comercial entre Estados Unidos y China y la posibilidad de un Brexit sin acuerdo son las principales causas de la caída de la demanda exterior.

La economía interna goza sin embargo de mejor salud, aunque “el crecimiento en el empleo creció más despacio que en trimestres anteriores”, dice el informe. La construcción y el consumo interno registran sin embargo buenos datos.

El informe del Bundesbank se produce en un momento de debate en Alemania, un país alérgico al déficit, sobre si es necesario recurrir a planes de estímulo para hacer frente a los nubarrones económicos. El propio ministro de Finanzas alemán, Olaf Scholz, no descartó el domingo a aprobar si fuera necesario un plan de estímulo de 50.000 millones de euros como el de la crisis financiera de 2008/2009.