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Cancún aumenta su capacidad turística con la ampliación de su aeropuerto

La Terminal 4 permite recibir nueve millones de personas más al año y lo consolida como el segundo aeropuerto de México

Luis Pablo Beauregard
La nueva Terminal tiene 18 puertas de embarque adicionales.
La nueva Terminal tiene 18 puertas de embarque adicionales. Elizabeth Ruiz (Cuartoscuro)

El aeropuerto de Cancún se afianza como el segundo más importante del país. La Terminal 4 del edificio, inaugurada el martes por el presidente Enrique Peña Nieto, permitirá recibir nueve millones de pasajeros más al año al Estado de Quintana Roo. En total, el aeropuerto aumenta su capacidad a 31 millones de personas, el 86% de lo que transportó el Benito Juárez de Ciudad de México en 2016. “La Terminal 4, por sí misma, se convierte en el cuarto más importante y grande del país detrás del de Ciudad de México, Guadalajara. Solo esta parte es más grande que todo el aeropuerto de Monterrey”, dijo el mandatario mexicano.

“Esta es la mejor puerta de entrada a esta región de México”, dijo Fernando Chico Pardo, presidente de Aeropuertos del Sureste (Asur), un grupo que opera nueve centros en esta zona del país. La Terminal 4, sin embargo, redobla la apuesta la apuesta en este destino turístico. Esta es la segunda ampliación que se hace del aeropuerto en 22 meses. En total, se han invertido 4.700 millones de pesos (245 millones de dólares) para las terminales 3 y 4 en este sexenio.

“México se consolida como uno de los destinos turísticos más importantes del mundo. Pasamos del lugar 15 en 2012 a ser el octavo”, dijo Peña Nieto. La Terminal 4 opera en una primera etapa y continuará creciendo para recibir a otros nueve millones de pasajeros adicionales. Esto lo llevará a tener una capacidad de 40 millones de pasajeros en 2020. Este año, no obstante, el aeropuerto cerrará con 23 millones de pasajeros, el 65% del total de turistas que México tuvo el año pasado. “El turismo que recibe Quintana Roo es muy superior al que reciben muchos otros países de la región latinoamericana. Más grande que lo que recibe Brasil, Colombia y Argentina”, agregó el presidente.

La Terminal 4 comienza este miércoles sus operaciones con 14 aerolíneas nacionales e internacionales. En total, 80 líneas de todo el mundo, operan en el aeropuerto. La construcción ocupa 270.000 metros cuadrados e incluye un rodaje de un kilómetro que une dos pistas y permite el tránsito de aviones en ambos sentidos. El equipaje documentado de los pasajeros viajará por un sistema de tres kilómetros de bandas que será vigilado por videocámaras. Chico Pardo aseguró que los viajeros tardarán 20 minutos de su llegada al aeropuerto a una de las 18 puertas de embarque gracias a 80 mostradores de documentación y 10 filtros de seguridad. En la Terminal 4 trabajarán 1.500 personas.

El Gobierno de Peña Nieto ha realizado obras de modernización en 28 aeropuertos del país en cinco años de Administración. Gerardo Ruiz Esparza, el cuestionado secretario de Comunicaciones y Transportes, asegura al sector aeronáutico “le está yendo bien” en el gobierno del PRI. “Ha pasado de sufrir el cierre de seis aerolíneas hace seis años y de haber sido retirada la certificación de la FAA, lo que impedía nuevos vuelos entre Estados Unidos y México, a registrar un crecimiento histórico”, dijo el ministro. Entre 2012 y 2017 el volumen de pasajeros registró un crecimiento de 60% y la flota comercial aumentó un 40%, afirmó. 849 rutas se han creado en los últimos años.

A pesar de un desastroso septiembre, con dos fuertes sismos y el paso de los huracanes Harvey, Irma y María, la infraestructura en esta parte del país opera con normalidad. Quintana Roo tiene una tasa promedio de ocupación de 82%. Cinco de cada diez turistas que visitan este destino en la Península de Yucatán retornan. Su puerta de entrada a esta región se ha ensanchado.

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Sobre la firma

Luis Pablo Beauregard
Es uno de los corresponsales de EL PAÍS en EE UU, donde cubre migración, cambio climático, cultura y política. Antes se desempeñó como redactor jefe del diario en la redacción de Ciudad de México, de donde es originario. Estudió Comunicación en la Universidad Iberoamericana y el Máster de Periodismo de EL PAÍS. Vive en Los Ángeles, California.

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