El PP propone grandes consensos nacionales con el PSOE

El director de la Oficina Económica del presidente del Gobierno, Álvaro Nadal, lanzó ayer un guiño al PSOE para alcanzar grandes consensos en algunas materias trascendentales como la educación, la sanidad, la fiscalidad y otros de alcance nacional. En un encuentro organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) con los responsables de economía de los cuatro partidos mayoritarios, Álvaro Nadal tendió la mano a Manuel de la Rocha, responsable de Economía socialista, de cara a las próximas elecciones generales, en las que no se espera mayoría absoluta de ningún grupo. Nadal, que hizo referencia a la gran coalición alemana, subrayó que le gustaría ver al PSOE en el “bloque de moderación democrática y económica que en Europa ha permitido prosperidad económica”, criticando los pactos con Podemos y acusando al principal partido de la oposición de "radicalidad" por sus pactos postelectorales con Podemos.

Manuel de la Rocha desdeñó, en respuesta a Nadal, la “estrategia del miedo” del PP. No es el primer mensaje que Nadal y su partido han enviado al PSOE,  apelando a las dos grandes familias políticas europeas. De la Rocha le contestó que el PSOE está por “la regeneración y la centralidad” y que “la estrategia del miedo no tiene recorrido”, añadió en referencia a los ataques recibidos por el PP.

Al tiempo a Podemos le recordaba que, si bien coinciden en su voluntad de cambiar España, no se va a salir del marco constitucional y democrático. Para De la Rocha hay varias razones para oponerse a esos grandes pactos: “Es malo para la democracia, es malo para el PSOE y, además, existen diferencias básicas entre los dos grupos”.

Esas diferencias, sobre todo ideológicas, se centran principalmente en el terreno laboral y fiscal y en ellas también abundaron los otros dos participantes en el debate (Luis Garicano, por Ciudadanos, y Nacho Álvarez, por Podemos). En ese sentido, De la Rocha incidió en que su grupo hará una nueva reforma laboral si llega al poder que recupere la Negociación Colectiva y luche contra la pobreza. En todo caso, la reforma pasaría por acabar con la dualidad del mercado laboral y garantizar los contratos indefinidos, eliminar la temporalidad y asegurar la rotación.

Mientras el representante de Podemos pide un Plan de Empleo, el de Ciudadanos se manifestaba contrario a reformar el salario mínimo interprofesional y la renta mínima garantizada que pedían PSOE y Podemos por ser “desincentivador”. “Se necesita un complemento salarial que incentiva y hace que la gente trabaje más”, añadió.

Aparte de las cuestiones laborales, los cuatro coincidieron en el diagnóstico sobre las necesidades del país (mejorar la competitividad y la productividad, luchar contra el paro y crear empleo de calidad, renegociar la deuda, cambiar el modelo productivo y focalizar el gasto en educación, sanidad y bienestar social), aunque la cirugía propuesta sea distinta.

En ese sentido, se enmarca la cuestión fiscal. Todos menos el PP abogaron por una reforma que afecte a todos los impuestos y tenga la lucha contra el fraude su principal motor. Además, De la Rocha apeló a la necesidad de gravar mejor la riqueza y no penalizar a las clases medias, reformar el Impuesto de Sociedades de manera que no se pague menos del 15% e introducir una fiscalidad medioambiental.

Álvarez aprovechó  para asegurar que su grupo no va a pedir ningún impago de deuda para no perjudicar al país, en referencia clara a la situación griega.