El FMI suspende la negociación con Grecia hasta que haya nuevo Gobierno

La convocatoria de elecciones generales en Grecia obligó al Fondo Monetario Internacional a suspender las negociaciones que deben llevar a un nuevo desembolso de la ayuda que llega a Atenas para reequilibrar su economía mientras el país reestructura sus finanzas. Lo que el organismo no dice es qué pasará con el programa si el partido Syriza es impone en el voto el 25 de enero, porque una de sus promesas electorales es cancelar los términos del rescate. 

Gerry Rice, responsable de comunicación del organismo, se limitó a decir en un escueta nota que la discusión en curso con las autoridades griegas se retomará “cuando el nuevo Gobierno esté formado”. Es un proceso que va de la mano de la Comisión Europea y el Banco Central europeo, por lo que antes de restablecer las negociaciones deberán consultarse.

El FMI deja claro también que Grecia “no necesita asistencia financiera inmediata”. A final del pasado mes de mayo se pactó el quinto desembolso de ayuda. La institución financiera que dirige Christine Largarde aprobó en marzo de 2012 un plan de cuatro con el que se pueden movilizar hasta 28.000 millones de euros, que completan los desembolsos de los socios europeos.

En su última evaluación, los expertos del FMI señalaban que la confianza de los inversores estaba mejorando y que la economía empezaba a crecer este 2014 tras seis años de profunda recesión. Sin embargo, sigue arrastrando serios problemas que debe superar, como la elevada deuda que acumulan los bancos y en agujero en las cuentas públicas pese al avance en la consolidación fiscal.

El último desembolso a Grecia ascendió a 3.410 millones de euros, lo que elevó el total movilizado hasta la fecha por el organismo a 11.580 millones. El gran temor del FMI en estos casos es que las autoridades bajen la guardia y den pasos atrás a la hora de aplicar las reformas que exigen el plan de rescate.

A este respecto, la suspensión del rescate llega en un momento en el que las relaciones entre los acreedores y el Gobierno de Antonis Samaras no atravesaban su mejor momento. Pese a la presión internacional, el primer ministro se negó a subir el IVA de los medicamentos y eludió un nuevo recorte de las pensiones, que eran dos de las últimas peticiones de los acreedores. Ahora su rechazo se ve de otra manera tras la convocatoria de elecciones. No obstante, ante la posibilidad de que otras reformas aprobadas sufran frenazos, el Gobierno alemán ya ha advertido por boca de su ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble, de que deben seguir adelante y que no aceptarán ningún paso atrás desde Atenas.

El mayor momento de tensión del día se ha vivido en torno al mediodía al conocerse el resultado de la votación del candidato propuesto por el conservador Samaras, el excomisario europeo Stavros Dimas. Este solo ha recabado 168 votos a favor, lejos de los 180 necesarios.

"Esto es una mala noticia para Grecia y el resto de la eurozona, habrá que estar pendientes de ver cómo evoluciona la campaña y las encuestas en las próximas semanas", ha resumido Raimund Saxinger, de GmbH. Luca Cazzulani, estratega de Unicredit, ha añadido en declaraciones a Bloomberg que Grecia será un foco de incertidumbre durante un tiempo. Se prevé que los comicios tengan lugar el 25 de enero, cuando se tendrían que haber celebrado a mediados de 2016. Sin embargo, Cazzulani ha recordado que los mercados siguen contando con la red de seguridad que suponen las medidas del BCE y que garantizan la liquidez. Este hecho es el que, en su opinión, explica que la tensión no hayan llegado ni a la deuda española ni a la italiana. La griega, no obstante, ha sufrido con las ventas y la rentabilidad exigida a sus bonos a tres años, los primeros que el país puso en el mercado tras el rescate, han tocado con un 11,5% su nivel más alto desde julio, cuando se colocaron entre los inversores.

La tensión lastra a las Bolsas

Por su parte, entre los mercados bursátiles más damnificados de este lunes, la Bolsa griega ha llegado a ceder un 11% tras confirmarse el resultado de la tercera y última votación en el Parlamento. Sin embargo, luego ha moderado el correctivo hasta cerrar con una caída inferior al 4%. Pese a ello, se deja un tercio de su valor en 2014.

En España, el selectivo Ibex 35 ha llegado a retroceder un 2,4% en el momento en el que se conocía el resultado de la votación. No obstante, tras este mínimo intradía ha moderado los números rojos y ha acabado cerrando con una caída del 0,93%, con lo que este martes abrirá en 10.384 puntos. En el resto de los mercados europeos solo Milán ha acabado la sesión en rojo con un retroceso del 1% pese a las abultadas ventas que han tenido lugar por la mañana. En las divisas, el euro ha rozado su nivel más bajo de los dos últimos años sobre los 1,21 dólares, aunque luego ha conseguido remontar a medida que avanzaba la sesión.

Para los inversores, lo sucedido en Atenas amenaza con amargar el final de año de un ejercicio que, salvo hecatombe, acabará en verde. Para las dos jornadas que quedan no hay apenas referencias y hay que recordar que el día 31 los mercados abren solo media sesión. En el caso del Ibex, el selectivo ha ganado un 4,71% en todo 2014 a falta de estas dos jornadas.