Rusia eleva los tipos sobre el 10% para atajar la escalada de la inflación

El banco central de Rusia ha subido este jueves los tipos de interés del 9,50% anterior al 10,50% para frenar la escalada de la inflación y las expectativas crecientes de que el rublo seguirá perdiendo valor en el mercado de divisas. El banco, además, ha pronosticado un crecimiento más bajo de lo estimado y ha advertido de que seguiría elevando el precio del dinero si los riesgos inflacionarios aumentan. Tras este nuevo incremento del precio del dinero, los tipos han subido en cinco puntos porcentuales en lo que va de año.

Según el nuevo cuadro macroeconómico que maneja la institución, la tasa del PIB estará "cercana a cero" por el desplome del precio petróleo y el impacto de las sanciones durante los próximos dos años. Una vez superado el bache, confía en que la actividad económica comience a recuperarse en 2017 a medida que aumenten las exportaciones al margen de las materias primas y se desarrollen las industrias sustitutivas de las importaciones afectadas por las sanciones.

El banco se ha visto obligado a endurecer su política para apoyar al rublo, que se ha depreciado casi un 40% contra el dólar desde junio, y para contener a la inflación, que en noviembre alcanzó un 9,1%. Con vistas al futuro, las estimaciones del instituto emisor ruso apuntan a que la inflación para el conjunto del ejercicio se situará "en torno al 10%", con una contribución de 4,9 puntos porcentuales a este incremento de la depreciación del rublo y de las restricciones comerciales impuestas.

Sin embargo, de momento, la decisión del banco central no ha frenado la persistente caída de la divisa, ya que muchos inversores anticipaban acciones más fuertes de apoyo a la moneda. Este jueves, el rublo ha extendido sus pérdidas.

El banco central ha invertido más de 75.000 millones de dólares este año en la defensa del rublo. El mes pasado, la autoridad anunció que dejaba de usar la banda de operaciones cambiarias para el rublo, dando paso a una flotación libre de la moneda en el mercado, lo que también ha causado pérdidas millonarias a los inversores en productos derivados ligados a la divisa.