Los inversores piden al bono español a 10 años menos intereses que al de EE UU
La Bolsa se mantiene por encima de los 11.000 puntos tras la subida por el plan de Draghi
Los mercados mantuvieron hoy la buena racha de la semana pasada, con el plan de estímulos monetarios del Banco Central Europeo (BCE) como gran locomotora, y el interés que los inversores exigen al bono español a 10 años bajó hasta el 2,56%, frente al 2,63% logrado el viernes, lo que significa seguir rompiendo el nivel mínimo en la historia del euro. Estas siete centésimas de contracción, además, sitúan la rentabilidad ofrecida por la deuda española por debajo de la EE UU a 10 años, hoy en el 2,61%.
Los intereses que la comunidad inversora reclama para poner su dinero en títulos de deuda de un país suponen un importante barómetro de la fiabilidad de una economía, por eso el salto del bono español sobre el estadounidense es llamativo, ya que EE UU se mantiene con la máxima nota de solvencia para dos de las tres grandes agencias de calificación (la triple A), mientras que España está a dos escalones del bono basura o, lo que es lo mismo, siete pasos por debajo de la primera potencia mundial. El pasado abril este hito ya fue logrado por los bonos españoles a cinco años, que pagaron menos intereses que los de EE UU. También ocurrió de forma muy puntual, con la deuda a largo plazo, en 2010, y entre 2004 y 2007, pero entonces España tenía triple A, como EE UU.
Con la misma divisa, España paga más intereses que Estados Unidos
Para entender cómo esto es posible ahora hay que tener en cuenta no solo el fuerte programa de estímulos anunciados la semana pasada por Mario Draghi, que ha resultado alentador para los países periféricos del euro, sino también que España emite su deuda en euros y EE UU en dólares. Si los bonos estadounidenses se emitiesen en la divisa europea ofrecerían una rentabilidad mucho más alineada con la alemana, que paga un 1,3% en el mercado secundario por sus bonos a 10 años. Por ejemplo, si tomamos como referencia unos títulos emitido por el Tesoro español en dólares que vencen dentro de cuatro años, la rentabilidad exigida hoy en el mercado secundario alcanzaba el 1,96%, mientras que unos bonos de EE UU con el mismo plazo de vencimiento pagaban menos, un 1,3%.
El efecto divisa también ayuda a explicar por qué los bonos españoles cotizaron mejor la semana pasada que los del Reino Unido, emitidos en libras esterlinas.
Además, como la inflación es más elevada en EE UU que en la zona euro (la tasa anual estaba en el 1,5% en marzo para los primeros y en el 0,5% en el mismo mes para los segundos), los inversores demandan más intereses, porque el tipo de interés real (descontando el efecto del aumento de los precios) de los países de la unión monetaria es más elevado.
Aun así, el programa del BCE (con los intereses en el mínimo histórico del 0,10% e inyecciones de crédito barato de hasta 400.000 millones, entre otras medidas) ha calentado las compraventas de títulos en el mercado secundario, en el que los inversores intercambian papel ya emitidos, y se dejará sentir también en la próxima subasta del Tesoro.
En esta línea, la prima de riesgo, que es la rentabilidad extra que exigen los inversores a los bonos españoles respecto a los alemanes, que son considerados el valor más seguro, se estrechó a los 119 puntos básicos, el nivel más bajo desde 2010, en tanto que el interés del bund germano se sitúa en el 1,35%. Los italianos rentan el 2,7%, aunque también se han visto beneficiados por el empujón del BCE.
Además, la Bolsa logra mantenerse por encima de los 11.000 puntos, una barrera que no lograba sobrepasar desde 2010 y que recuperó el viernes. El Ibex 35 acabó la sesión con una subida del 0,90%, hasta los 11.164 puntos, un nivel que no se tocaba desde abril de 2010. El resto de grandes plazas europeas también registraban subidas, aunque muy leves, por debajo del 0,50%.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.