Los sindicatos europeos pedirán a los líderes de la UE inversiones para crear empleo

La Confederación Europea de Sindicatos (CES) pedirá a los gobernantes de los Veintiocho que inviertan para crear empleo, en lugar de apostar por "malas políticas" en materia de economía, industria y energía, dijeron hoy al término de una cumbre sindical.

"La austeridad no funciona, es urgente abrir una nueva vía", dijo la secretaria general de la Confederación Europea de Sindicatos, Bernadette Ségol, que insistió en que "Europa necesita inversiones para crear empleo".

El mensaje de los sindicatos se trasladará al presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, al del Consejo, Herman Van Rompuy, y a la Presidencia de turno de la UE, que ejerce Grecia, con motivo de la cumbre social tripartita que se celebra el jueves, antes del inicio de la cumbre europea.

"Mañana el Consejo hablará de economía, industria y energía. Estas políticas podrían crear trabajo, pero no lo harán. Porque la política industrial no dispone de instrumentos para crear empleo, a la política energética le falta ambición y la política económica está basada en la austeridad y la desregulación. Son políticas económicas erróneas", dijo Ségol.

Los sindicatos estiman que una inversión de 250.000 euros en diez años podría crear 11 millones de empleos nuevos, una inversión que según calculan, representa solo una cuarta parte de lo que se gastaron los Estados miembros en los rescates bancarios y de lo que se pierde cada año por la evasión de impuestos y el fraude fiscal.

La cumbre europea de primavera tiene previsto "explorar maneras de reconstruir la confianza en Europa", con motivo de las primeras tímidas señales de recuperación económica.

En particular, se hablará del llamado semestre europeo, que es el calendario para coordinar las políticas económicas y presupuestarias de la UE y la eurozona, y de los planes en el materia de industria y energía, con el objetivo de impulsar el crecimiento y el empleo.

"Con las políticas de austeridad actuales, Europa afronta un decenio y una generación perdidas", advirtieron los sindicatos, que recordaron que más de 26 millones de ciudadanos en la UE no tienen empleo, lo que supone 10 millones de parados más que en 2008.

Por otra parte, la CES advirtió de la caída de los salarios reales (ajustados en función de la inflación y sin tener en cuenta el aumento de los impuestos directos) producida en la Unión en los últimos cinco años.

Desde 2009, los sueldos han disminuido en 18 de los 28 Estados miembros.

Según los sindicatos europeos, la caída ha sido del 23 % en Grecia, del 12 % en Hungría, de más del 6 % en España y Portugal y de más del 4 % en Holanda y Reino Unido.