¿Tendré dinero para mi vejez?

“Desconocimiento y preocupación”. Estas son las conclusiones que obtiene David Carrasco, director del Instituto BBVA de Pensiones, tras analizar las respuestas de las 3.000 personas en las que se basa la Encuesta sobre la jubilación y los hábitos de ahorro que ha elaborado esta entidad financiera. “En España, la cultura financiera es baja, y además el sistema de pensiones es complejo tras sufrir numerosas reformas. Hemos detectado que existe una necesidad de conocimientos en materia de jubilación”, advierte Carrasco. “La gente demanda que se le facilite información, que le expliquen qué tiene que hacer con su dinero para que cuando llegue su retiro los ingresos que reciba colmen sus expectativas”, añade.

El 45% de los encuestados reconoce que consigue ahorrar, porcentaje que se incrementa conforme aumenta la clase social. Por comunidades, Andalucía es donde este dato es menos positivo, mientras que Asturias se sitúa en el extremo opuesto. Por término medio, el ahorro representa en torno al 15% de los ingresos mensuales del hogar. En ese excedente, la jubilación tiene un protagonismo destacado como objetivo del ahorro, estando presente en el 21% de los hogares y creciendo conforme se acerca la edad de jubilación. Además, entre los que no consiguen ahorrar, jubilación, vivienda y ocio serían los principales destinos para su dinero en el caso de tenerlo.

La gente que puede ahorrar no sabe

La crisis económica ha hecho que se tambaleen los pilares del Estado de bienestar. Esta preocupación por el futuro de la pensión pública explica que el 86% de los encuestados por el BBVA crea “necesario” ahorrar para complementar la pensión que les corresponda cuando se jubilen. En cambio, solo el 31% admite que está ahorrando para ese fin (cuanto mayor es la edad, más aumenta este colectivo). Casi la mitad de aquellos que están ahorrando para la jubilación afirman que dedican a este fin un porcentaje de sus ingresos que se sitúa entre el 5% y el 15%. Un 4% de las respuestas asegura que dedican más de un 25%. La mayoría (63%) de los que hacen aportaciones para la jubilación afirman hacerlas con una periodicidad mensual, por un 13% que las hace “esporádicamente”.

La edad media del comienzo del ahorro para la vejez es de 32 años, y casi el 60% de los encuestados señala que tiene un “plan de ahorro definido”. Un dato relevante es que existe un “muy notable desconocimiento” respecto al porcentaje de ahorro destinado a complementar la pensión pública que permita mantener su nivel de vida actual. También existe una “notable incertidumbre”, según el BBVA, respecto a la idoneidad de las decisiones de ahorro que se están tomando para alcanzar el ahorro suficiente para la jubilación. Prácticamente la tercera parte de la población manifiesta una absoluta inseguridad, e incluso aquellos que están ahorrando dudan si lo están haciendo “correctamente”. En relación con este punto, casi la mitad de la población considera que no dispone de conocimientos financieros suficientes para planificar su pensión. Este porcentaje es más elevado entre las mujeres y los más jóvenes.