_
_
_
_
OPEP REUNIÓN

La OPEP se reúne sin planes de tocar la producción y con Irán de protagonista

Vista general de la 163ª reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), en Viena (Austria). EFE/Archivo
Vista general de la 163ª reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), en Viena (Austria). EFE/ArchivoEFE

No tocar lo que funciona bien. Esa es la premisa con la que los doce socios de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se reúnen mañana en Viena, con unos precios del crudo estables y rentables y a la espera de que el aumento de las exportaciones de Irán modifique la situación.

"Los precios son buenos, el suministro, la demanda están en equilibrio y los inventarios están bien situados". Así definió ayer la situación Ali Naimi, ministro de Petróleo de Arabia Saudí, que con un tercio de la producción total de la OPEP es el líder natural del grupo.

Con el precio medio del crudo por encima de los 100 dólares desde hace tres años, se espera que el cartel petrolero tenderá a mantener inalterada su actual producción conjunta, que se estima en 29,89 millones de barriles diarios (mbd).

Ese bombeo es ligeramente inferior al tope de 30 mbd que los doce países productores mantienen sin cambios desde hace dos años.

"El mercado está en la mejor posición en que puede estar. La demanda es excelente, el crecimiento económico está mejorando. ¿Qué queremos? ¿Por qué deberíamos ser pesimistas?", resumió Naimi, al asegurar que no hay argumentos para recortar la producción.

La sensación de que los ministros de la OPEP no tocarán mañana los grifos fue confirmada a Efe por Bill Farren-Price, presidente de la consultora Petroleum Policy Intelligence.

"No hay deseo de arreglar una máquina que no está rota. Creo que van a seguir haciendo lo que están haciendo ahora, es decir, ajustes informales entre los países del Consejo de Cooperación del Golfo", que reúne a varios Estados del golfo Pérsico, aunque no a Irak.

Por otra parte, en varios socios del grupo, como Libia, Irak y Nigeria, se han producido importantes caídas de la producción, sobre todo por problemas de seguridad.

El caso más preocupante es el de Libia, que ha pasado de producir por encima del millón de barriles diarios en verano a apenas una quinta parte de esa cifra, hasta alrededor de los 300.000.

Ante esta situación, "puede que haya que hacer algunos reequilibrios en 2014, pero (los países de la OPEP) no van a ser proactivos en eso, van a esperar a ver qué sucede", opinó Farren-Price.

Este consultor aseguró que nadie va a apoyar tampoco un aumento del bombeo, entre otras cosas porque la mayoría de socios de la OPEP "están produciendo todo lo que pueden" y sólo Arabia Saudí, Kuwait y Emiratos Árabes Unidos tendrían capacidad para elevar el ritmo de extracción.

Con la previsión de que el cartel, que suministra el 40 por ciento del crudo que quema el planeta, no toque mañana sus cifras, la atención de esta reunión se centra en Irán y en su posible vuelta plena a los mercados, si se levantan las sanciones de la ONU a las que está sometido por su conflictivo programa atómico

Tras el reciente doble acuerdo entre Teherán y las grandes potencias y con el Organismo Internacional de Energía Atómica, el debate ahora es qué ocurrirá si se suspenden las restricciones a la exportación de crudo del país asiático.

"No tenemos dificultades técnicas para ampliar nuestra exportación y para regresar a los 4 millones de barriles de producción", subrayó hoy el ministro de Petróleo de Irán, Bijam Namdar Zangeneh, quien recordó que la única cortapisa es política.

Las sanciones aprobadas por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y las unilaterales impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea han dejado las ventas de petróleo iraní en 1,2 mbd, frente a los 2,5 que tenía antes.

Si el acuerdo nuclear conlleva a un levantamiento del castigo, Teherán podría volver "inmediatamente" a bombear y vender tanto como antes, aseguró el ministro.

Pero si Irán bombea más, sus once socios tendrán que cerrar los grifos proporcionalmente, para no inundar de crudo una economía mundial aún convaleciente de la crisis financiera, lo que podría hacer bajar los precios.

Al respecto, Irán espera que sus socios sean "sabios" y no haya problemas en reajustar el reparto del pastel petrolero.

"Espero que cuando un socio retorna al mercado abran la puerta y no se enfrente con él", dijo Bijam Namdar Zangeneh.

Por Antonio Sánchez Solís

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_