Cameron ensalza las virtudes de Irlanda del Norte ante inversores extranjeros

El primer ministro británico, David Cameron, presentó hoy a Irlanda del Norte como una "zona muy especial" del Reino Unido donde "tiene sentido" invertir en su "exitosa" economía, tras 15 años de avances en su proceso de paz.

Cameron efectuó esas declaraciones en Belfast al comienzo de una conferencia internacional impulsada por el Gobierno autónomo norirlandés para atraer a inversores extranjeros, aprovechando la publicidad positiva que generó la celebración el pasado junio de la cumbre del G8.

Ante una audiencia de 350 emprendedores locales y foráneos, el primer ministro conservador destacó los "enormes" beneficios que podrían obtener aquellos dispuestos a establecerse en Irlanda del Norte.

"Creo fervorosamente en la capacidad de las empresas para crear empleo y crecimiento. Y creo fervorosamente en todo lo que Irlanda del Norte puede ofrecer. Invertir en Irlanda del Norte tiene sentido desde el punto de vista empresarial", aseguró el dirigente tory.

Los esfuerzos del Ejecutivo autónomo y del propio Cameron por presentar a la región bajo un prisma positivo se han visto empañados esta semana por la violencia de los grupos disidentes del ya inactivo Ejército Republicano Irlandés (IRA), opuestos al proceso de paz.

A pesar de que la cumbre del G8 transcurrió pacíficamente, este año ha estado marcado por los disturbios en las calles de la provincia y las tensiones entre los integrantes del Gobierno de poder compartido entre católicos y protestantes.

Los extremistas dispuestos a desestabilizar el proceso democrático, bajo la bandera de un "nuevo" IRA, asesinaron a tiros este martes en Belfast y dos días después en Derry, en el oeste de la región, a dos hombres supuestamente implicados en actividades delictivas y pertenecientes a la comunidad católica.

También hoy, el Servicio de Policía de Irlanda del Norte (PSNI) abortó un ataque con mortero listo para estallar en una comisaria de Derry, lo que provocó la evacuación de más de un millar de residentes en la zona.

"De vez en cuando, las noticias nos son adversas, pero si juzgáramos lo que pasa en cada país por las noticias tendríamos una visión deformada sobre nuestras existencias", declaró tras la intervención de Cameron el ministro principal norirlandés, el protestante Peter Robinson.

El líder del mayoritario Partido Democrático Unionista (DUP), a favor de la permanencia de Irlanda del Norte en el Reino Unido, recordó que la región ha "cambiado muchísimo" en los últimos 15 años, desde la firma en 1998 del acuerdo de paz del Viernes Santo.

"Hemos sentado las bases -dijo Robinson- para llevar nuestra economía hasta un nivel superior y la llegada de inversiones jugará un papel clave".

Su adjunto en el Ejecutivo, el nacionalista Martin McGuinnes, también reiteró que la provincia es un "sitio seguro" para hacer negocios, al tiempo que destacó la "ética laboral" de su población.

"Esto representa un paso más para que esta parte de nuestro mundo avance de una manera muy dinámica y pueda ofrecer un futuro mejor a toda la gente que representamos", agregó el "número dos" del Sinn Fein, antiguo brazo político del IRA.

A pesar del frente común presentado hoy por Robinson y McGuinness, las relaciones entre sus respectivos partidos se han enfriado en los últimos tiempos como resultado de la renacida tensión sectaria entre ambas comunidades.

En este sentido, Cameron mantendrá hoy un encuentro con ambos para analizar los problemas que afectan al proceso de paz.