El inversor cree que la Bolsa ya ha tocado suelo

La percepción de los ahorradores españoles sobre el futuro económico y sobre la evolución de los mercados financieros ha mejorado en el arranque de 2013. Así lo sugieren diferentes parámetros recogidos en la Encuesta de Confianza del Inversor en España, correspondiente al primer trimestre del año, que elabora J. P. Morgan Asset Management y que publica en exclusiva EL PAÍS.

Uno de los datos que sugieren ese cambio de tendencia se observa en las respuestas que dan los ahorradores cuando se les pregunta cuándo creen que España saldrá de la crisis. Por primera vez en cinco trimestres, el pesimismo se reduce. Aquellos que dicen que aún quedan más de dos años para dejar atrás la recesión suponen el 83,7% de las respuestas, frente al 88,4% de la oleada anterior. El 8,3% sitúa la salida del túnel en un plazo que oscila entre el año y medio y los dos años, y el 6,3% opina que la economía empezará a remontar en un año o un año y medio vista. En función de las respuestas todavía queda mucha travesía del desierto para el PIB español, pero parece que los plazos empiezan a acortarse.

Esta tímida mejoría en la percepción macroeconómica también se refleja en sus previsiones acerca de qué harán las Bolsas en los próximos seis meses. El número de optimistas —aquellos que ven muy probable o probable que los mercados suban— aumentó en el primer trimestre de 2013 (un 20,4% de las respuestas), frente al periodo octubre-diciembre de 2012 (este grupo solo representaba entonces el 14,2%).

Los ahorradores creen que el Ibex es el índice con mayor potencial de subida

La mejoría en la visión que tienen los ahorradores acerca del potencial de la Bolsa provoca que el Índice de Confianza del Inversor, aunque sigue en terreno negativo, experimente un rebote considerable con respecto a la oleada anterior y se sitúe en -2,54%, su nivel más alto en año y medio.

Cuando se pregunta a los ahorradores más optimistas por qué creen que la Bolsa subirá en los próximos seis meses, la respuesta más repetida con el 27,1% de menciones es que “ha caído mucho” y, por tanto, “ya no puede bajar más”. Como en trimestres anteriores, el mercado donde los ciudadanos ven mayor potencial de revalorización es el español. El 26,1% de los encuestados eligen el Ibex 35 como su índice bursátil favorito, la segunda opción son los mercados asiáticos, con el 21,8% de menciones, y la tercera es la Bolsa europea.

La larga crisis y las minusvalías que esta ha supuesto para muchos activos financieros ha provocado un cambio de patrón en las aspiraciones de los ahorradores. Esto hace que, aunque los ciudadanos tengan ahora mejores perspectivas que hace unos meses, conserven una estrategia ultraconservadora con sus inversores. Cuando a los ahorradores se les pregunta qué es lo que más valoran a la hora de invertir, el 52,7% responde que su aspiración es “no perder dinero”; el 35,8% confiesa que está dispuesto a sacrificar parte de la rentabilidad a cambio de “cierta seguridad”, mientras que solo el 11,5% dice que su objetivo es “conseguir la máxima rentabilidad”. Son porcentajes bastante similares a los del trimestre anterior y contrastan con los de la tercera oleada de 2007, cuando el 31,9% de los ahorradores tenían como meta lograr el mayor rédito posible.

Con esta mentalidad conservadora es lógico que el activo financiero favorito de los ahorradores españoles siga siendo el depósito bancario, aunque también hay que destacar que se percibe un cierto desgaste en los productos de pasivo que quizá se haga más patente en el próximo trimestre, cuando la encuesta refleje todo lo sucedido en Chipre con los depósitos de los ahorradores. El 69,9% de los encuestados dicen que adquirirán un depósito en los próximos seis meses, frente al 73,7% que tenía esa intención en el trimestre anterior. El 10,6% se decanta por los planes de pensiones, mientras que el 2,1% comprará participaciones de un fondo de inversión. La inversión en renta fija solo es elegida por el 2% de los ahorradores, el mismo nivel que la inversión inmobiliaria, mientras que la compra de acciones solo encuentra un 1,4% de adeptos.