FCC anuncia más de 1.000 despidos en su negocio de construcción en España

La crisis de la construcción ha forzado a FCC a realizar una profunda revisión del negocio. La compañía controlada por Esther Koplowitz ha anunciado este miércoles la supresión de más de un millar de empleos en España, el 15% de la plantilla nacional (6.500 trabajadores), y un programa de desinversiones por importe de 2.200 millones de euros hasta 2015 que incluirá la venta de la inmobiliaria Realia, la concesionaria de autopistas Globalvía y la división de energías renovables. El objetivo: aligerar el lastre que supone la deuda en 2.700 millones, hasta situarla en 5.200 millones en tres años.

El negocio se centrará en los proyectos de infraestructuras más rentables, la gestión y tratamiento de residuos urbanos y la gestión del agua, según indicó en una conferencia de prensa Juan Béjar, nombrado consejero delegado en enero, mientras la hija de la principal accionista, Esther Alcocer Koplowitz, fue situada como presidenta. La parte de servicios será la más beneficiada, ya que se llevará el grueso de las inversiones que contempla el plan estratégico 2013-2015: serán 1.100 millones de los 1.400 millones contemplados. “Nuestro mantra va a ser reducir deuda y generar caja”, aseguró el ejecutivo, que añadió que se suspenderá el reparto de dividendo hasta que la empresa vuelva a los beneficios, previsiblemente en 2015 (calcula que unos 170 millones de resultado neto). Además, FCC planea emitir bonos por hasta 750 millones para refinanciar parte de su deuda.

Estos cambios llegan después de que la constructora entrara en pérdidas por primera vez en 2012 tras años de bonanza por el boom de la construcción en España. Los números rojos alcanzaron los 1.028 millones el año pasado tras realizar ajustes, saneamientos y provisiones por 1.146 millones.

Respecto al ajuste laboral, que se llevará a cabo durante 2013, la dirección de la compañía ha iniciado los contactos con los representantes sindicales y confía llevar a un acuerdo para que la mayor parte de las bajas se hagan a través de prejubilaciones. También habrá una reestructuración en la filial cementera, Portland Valderrivas, que incluirá el cierre de una planta (en Cataluña o en el norte de España), aunque Béjar no concretó cuál. La producción de cemento en España se ha desplomado hasta niveles de la década de los cuarenta y el sector atraviesa un mal momento. “Ya tuvimos que reducir la plantilla en un 40% el año pasado”, recordó Béjar.

Ventas en construcción, servicios y energía

Del total de desinversiones previstas, 550 millones se realizarán en construcción, 270 millones en servicios y 1.380 millones en el resto, sobre todo energía, Realia y Globalvía. Béjar dijo no tener prisa por vender. En el caso de la inmobiliaria, en la que comparte accionariado con Bankia, los propietarios están negociando la refinanciación de 850 millones de euros en deuda que vence el 27 de marzo y que la firma debe cerrar para evitar acogerse a la Ley Concursal, como han hecho muchas empresas del sector (las últimas, Renta Corporación y Reyal Urbis). El director financiero de FCC, Víctor Pastor, se mostró confiado en que el acuerdo para refinanciar esa deuda por un periodo de tres años saldrá adelante sin problemas. “Estamos en las últimas fases para llegar a un acuerdo con los bancos”, dijo.

Tras la aplicación del plan, FCC espera que sus ingresos se sitúen en 9.700 millones en 2015, frente a los 11.897 millones de 2011, y su resultado bruto operativo (ebitda) recurrente alcance los 1.200 millones, frente a los 1.256 millones de 2011.