Alemania asegura en la ONU que Europa saldrá de la crisis "más fuerte que nunca"

"Muchos de ustedes se preguntan si Europa puede resolver con éxito su crisis de deuda y si continuará jugando un papel de liderazgo en el mundo. La respuesta es un 'sí' rotundo", dijo Westerwelle en su intervención durante los debates de la 67 sesión de la Asamblea General de la ONU.

El jefe de la diplomacia germana defendió la "responsabilidad de Alemania ante Europa" y reconoció que "la salida a la crisis de deuda soberana es difícil" y requiere "disciplina en el gasto, solidaridad y crecimiento".

"Continuaremos por ese camino. Europa está creciendo unida, se está consolidando y emergerá de esta crisis más fuerte que nunca", subrayó el ministro, quien dijo que se seguirá reconociendo a Europa como "el mayor donante en ayuda al desarrollo, inspiración para la cooperación regional y pionera en acción contra el cambio climático y el desarme".

Westerwelle dio una destacada importancia en su discurso a la crisis que vive la zona euro, mientras que también habló de las tensiones con Irán y pidió, ante la negociación impulsada por el grupo mediador 5+1, que Teherán ofrezca "respuestas serias" para lograr "una solución política y diplomática" al problema nuclear.

"Pido a Irán que deje de jugar con el tiempo. La situación es grave", aseguró el ministro, para quien "hay poco tiempo" para frenar las tensiones.

Asimismo se refirió al compromiso de su país con la "primavera árabe" y con la tarea de superar la parálisis que vive el Consejo de Seguridad para responder a la crisis en Siria.

Alemania, junto a los otros miembros europeos del Consejo de Seguridad -Reino Unido, Francia y Portugal-, ha defendido en el último año y medio varias resoluciones ante ese órgano para ejercer más presión sobre el régimen sirio de Bachar al Asad, iniciativas que se encontraron en tres ocasiones con el veto de Rusia y China.

"Hasta hoy el Consejo de Seguridad ha fracasado en mantener su responsabilidad hacia el pueblo de Siria", dijo el ministro, que abogó "por seguir trabajando para encontrar una solución política" a una crisis que se ha cobrado más de 25.000 muertos.

Durante su intervención en el plenario de la ONU, Westerwelle condenó "la existente represión en la vecina Bielorrusia", y defendió la reforma del Consejo de Seguridad para que Alemania pueda asumir "mayor responsabilidad" y para que América Latina, África y Asia obtengan puestos permanentes.