La campaña electoral concluye en el peor momento de la crisis española

El final de la campaña electoral no ha dado tregua a la prima de riesgo española, que ha vuelto a vivir un día caótico. Por la mañana saltaba la noticia de que alcanzaba los 503 puntos básicos -un nivel que no se alcanzaba en los últimos 14 años- y superaba a la italiana, añadiendo leña a un fuego de la crisis que ha sido el argumento casi único manejado por los candidatos, con la terrible cifra de cinco millones de parados como telón de fondo. El aspirante popular a presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha tenido que pedir a los mercados un "mínimo margen" para actuar si gana las elecciones, y se ha mostrado confiado en que el Ejecutivo aplaque el riesgo de un posible rescate europeo.

Sin embargo, las cosas se han calmado durante la tarde. El diferencial entre la deuda española y la alemana se ha estrechado al cierre del mercado hasta los 441 puntos básicos, animado fundamentalmente por las nuevas compras del Banco Central Europeo (BCE). La vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, ha comparecido tras el Consejo de Ministros para explicar que esta fuerte subida de la prima de riesgo se debía a una cuestión técnica, algo que luego han confirmado las agencias de calificación: la prima española no ha superado en ningún momento a la italiana durante el día de hoy.

El día ha sido un reflejo de lo que ha significado la campaña electoral: la prima de riesgo y la crisis del euro como telón de fondo de una situación muy complicada para la economía española. El principal favorito de todas las encuestas, Mariano Rajoy, ha intentado evitar por todos los medios el anuncio de recortes que sin duda tendrá que hacer pero que no quiere airear para no perder votos. El candidato socialista ha basado en la estrategia de Rajoy gran parte de su campaña: según Rubalcaba, el PP tiene un programa oculto que no dudará en aplicar en cuanto gane las elecciones y que va a significar un ajuste muy duro para gran parte de los españoles, con recortes en servicios básicos como la educación o la sanidad. Mientras, IU aspira a lograr un grupo parlamentario y recuerda que va a ser "la voz de la calle en el Parlamento", y UPyD confía en seguir creciendo en toda España. Todos, de un modo u otro, asumen lo que casi todo el mundo piensa y lo que los mercados ya dan por descontado. Gobernará Rajoy con la mirada puesta en Bruselas y en lo que diga la canciller alemana Angela Merkel.

Salgado da explicaciones

La vicepresidenta Elena Salgado ha querido, tras el Consejo de Ministros, reiterar la solvencia de España y ha revelado que harían falta entre seis y siete años de financiación a precios altos para que el repunte registrado ayer en una subasta de obligaciones a 10 años, en la que el Tesoro abonó un interés récord en 14 años superior al 7%, genere "preocupación" sobre la deuda española. Tras explicar que este incremento en los costes es puntual y afecta a una parte muy pequeña del pasivo del Estado (unos 3.500 millones sobre un total de más de 580.000 millones), ha defendido que el resultado de la operación "no supone un riesgo para la sostenibilidad" de la deuda ya que tiene un impacto "marginal" en la capacidad para financiarse. También ha atribuido a un efecto técnico el récord que ha marcado esta mañana la prima de riesgo española en 503 puntos básicos, un máximo de la era euro y un nivel desconocido desde 1997, en el último día de la campaña electoral.

Para justificar esta matización, Salgado ha recordado que el interés medio que paga el Gobierno por ella sigue estando por debajo del 4% del PIB y tiene un vencimiento agregado de entre seis y siete años, de ahí que sea necesario que los tipos elevados se prolonguen durante este tiempo para derivar en problemas de acceso al mercado de financiación.

La también ministra de Economía ha incidido en la sostenibilidad de la deuda destacando que el Estado ya ha realizado el 89% de las emisiones de deuda a largo plazo previstas para este año. También con que la carga de intereses en relación al PIB es de las más bajas de la UE y cerrará el año más de 20 puntos por debajo de la media europea. "Por tanto, tranquilidad, pero también toda la voluntad y determinación para, en unión de nuestros socios europeos reducir, lo antes posibles las tensiones", ha resumido.

En cualquier caso, ha defendido que el encarecimiento de la rentabilidad de la deuda registrado en la subasta y el alza en la prima de riesgo "no están justificadas". En opinión de la vicepresidenta, el deterioro de la situación de la deuda española se debe más a las presiones sobre el conjunto de la eurozona que a problemas concretos de su economía, "que no han cambiado" en el mismo periodo.

Sobre este hecho, además, ha explicado que la confusión generada a lo largo de la mañana sobre cuál era el dato correcto de la prima, que según algunas agencias de información habría llegado a los 520 puntos básicos a primera hora, se ha debido a un cambio en el bono de referencia que se usa para establecer la prima con el título emitido ayer, que tiene un interés más alto al tener también un plazo mayor.

Por este motivo, ha añadido Salgado, "no tiene liquidez" y su impacto al alza en el diferencial no representa que el interés del bono "esté bajando o subiendo". "Los datos que van saliendo no tienen significación estadística suficiente" para ello, ha argumentado para justificar que, si se sigue utilizando el mismo bono que ayer, "en ningún momento ha estado la prima de riesgo a 10 años por encima de la italiana".

En cuanto a si el recorte de la previsión de crecimiento del 1,3% al 0,8% que anunció ayer el secretario de Estado, José Manuel Campa, afectará a los objetivos de déficit público, fijado en el 6%, Salgado ha adelantado que la Administración central cumplirá con su parte y alcanzará las metas comprometidas ante Bruselas "con comodidad".

En este sentido, la vicepresidenta ha incrementado a entre 3.200 a 3.400 millones de euros el dinero que no se ha gastado para pagar intereses frente a lo previsto en los Presupuestos de este año. Gracias a este menor desembolso, ha destacado, hay "algunos márgenes en algunas partidas que van a permitir cumplir a la administración central cumplir con comodidad". En lo que respecta a las comunidades, algunas de las cuales han superado los límites, ha comentado que aunque aún no tienen datos de ejecución presupuestaria del tercer trimestre, "la constatación de que el gasto público se ha ido reduciendo permite adelantar que los planes de consolidación se van cumpliendo", ha celebrado.

Preguntada sobre si será necesario tomar más medidas de ajustes a corto plazo y las restricciones que provoca que el Gobierno vaya a estar en funciones a partir del lunes, después de las elecciones, hasta al menos hasta la semana que empieza el 19 de diciembre, Salgado ha sido rotunda. "La actuación más importante que habrá que tomar en los próximos meses es la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado para 2012, esa es la medida más importante, pero corresponderá ya al Gobierno que salga de las urnas", ha respondido.