La superficie visada por los arquitectos cae en Cataluña un 88% en cinco años

La resaca de una tremenda borrachera. La hecatombe en cifras. El Colegio de Arquitectos de Cataluña ha puesto hoy cifras a la vertiginosa caída de la construcción y ha exigido la implicación de las administraciones y la banca, a la que ha responsabilizado en parte del parón del sector por restringir el crédito. La superficie visada ha caído un 88% en los últimos cinco años: en el primer semestre de 2006 se visaron 30 millones de metros cuadrados y este 2011, ni 4 millones.

De 128.000 pisos visados en 2006 se ha pasado a una previsión de cierre de 2011 de 6.700. Como consecuencia de todo, en un lustro el peso de la construcción en el PIB ha pasado de entre el 10 y el 12% a entre el 1 y el 2%. "Es una caída desconocida en cualquier otro sector de la economía catalana", ha clamado el habitualmente comedido decano de los arquitectos, Lluís Comerón, que ha asegurado que hay 100.000 puestos de trabajo en riesgo.

No hay esperanza ni en los dos sectores que desde el estallido de la burbuja se han considerado refugio: la vivienda pública y la rehabilitación. Los arquitectos aseguran que en lo que va de año no han visado ni un metro cuadrado, cero, de vivienda pública. La Generalitat lo desmiente. Ha enviado una nota para "aclarar" las cifras. El Departamento de Territorio asegura que entre enero y mayo se han otorgado "calificaciones provisionales" para 1.466 viviendas protegidas.

Aun así, añade la Secretaría de Vivienda, comparte la preocupación del sector y señala como culpables de la situación de menor edificación protegida a la "dificultad de encontrar financiación", a la rebaja de los fondos llegados desde el Estado para subvenciones a promotores y compradores de vivienda y a que "el tipo de interés que prevé el Plan de la Vivienda no lo pueden aplicar las entidades financiaeras para el encarecimiento del rpecio del dinero por parte de estas".

La rehabilitación, según los arquitectos, también ha caído a una cuarta parte respecto a 2006. "Ningún sector, ni la rehabilitación, puede suplir la actividad", ha reconocido Comerón, sin omitir que las cifras de 2006 y 2007 fueron "un exceso". Tampoco hay demasiada actividad en la construcción de equipamientos.

Las gráficas que ha presentado hoy el colegio muestran como ni la crisis de la década de 1960, ni la del petróleo en la de 1980, ni la que siguió a los Juegos Olímpicos de 1992fueron de la magnitud de la actual: nunca se bajó de 22.000 viviendas anuales. Todo el mundo que tenga un conocido arquitecto lo sabe: "Despachos de 10 personas están aguantando con dos. Despachos de cuatro, con uno que se ha ido a casa. Si no hay escenario de futuro el patrimonio de los arquitectos, que es el conocimiento, no tiene sentido", ha lamentado el decano.

La frase del sector es, asegura: "Vamos fatal, veremos si en septiembre cerramos". Internamente, el Colegio de Arquitectosde Cataluña ha registrado una caída del 60% de los ingresos y ha prescindido del 60% del personal. En cambio, apenas ha registrado un descenso de colegiaciones, lo que demuestra, según el decano, la profesionalidad de los arquitectos y su "compromiso de intentar responder con proactividad".

Comerón ha insistido en que las cifras de los arquitectos son el anticipo de lo que ocurrirá en la construcción en un horizonte de uno o dos años. De ahí, ha asegurado, que el descenso de puestos de trabajo no sea por ahora, proporcional. De 450.000 personas se ha pasado a 250.000 "porque los proyectos se alargan, se difieren, ha habido expedientes de regulación de empleo temporales... pero las obras no se pueden alargar indefinidamente, hay más de 100.000 puestos de trabajo en riesgo, una cifra inasumible para Cataluña".

Ante este panorama, y después de que el sector entero lanzara hace dos meses el Manifiesto Construmat, un SOS a las administraciones, el Colegio de Arquitectos ha pedido la creación urgente de una mesa sectorial con los departamentos de Territorio y Economía, promotores y aparejadores, que se reactive la actividad en localidades donde el stock se ha normalizado, que se construya vivienda pública de alquiler y equipamientos y que haya un cambio de reglas en el sector bancario. A nivel interno, están fomentando la formación para dar nuevas salidas a los profesionales.