Iberia reduce sus pérdidas un 43,8% gracias al plan de ahorro

Iberia perdió 52 millones de euros en el primer trimestre de 2010, un 43,8% menos que en el mismo periodo del año anterior, cuando tuvo unos números rojos de 92,6 millones, los primeros en los últimos 13 años, según ha informado hoy la compañía en una nota remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Además, ya fuera de este trimestre, ha cifrado en 17 millones el impacto de la nube de cenizas volcánica en sus resultados operativos por la cancelación de 600 vuelos -1.000 si se incluye a su filial Air Nostrum-, pérdida de reservas y diversas actuaciones para hacer frente a la situación generada entre el 15 y el 21 de abril: alojar a más de 6.000 pasajeros (9.000 noches de hotel), autobuses o taxis para trasladar a 5.000 clientes y cambios de reserva a 40.000 personas. En concreto, su tráfico bajó un 9,5% durante el pasado mes por este motivo.

Por culpa de la crisis, el sector aéreo ha afrontado un proceso de reestructuración cuya principal consecuencia están siendo las fusiones. La propia Iberia está en plena operación con British Airways, mientras al otro lado del Atlántico, United y Continental ya se han unido para crear la mayor aerolínea del mundo. En un Ibex teñido casi por completo de rojo, las acciones de la aerolínea española caían a pocos minutos de las 10.00 un 1,76% hasta los 2,29 euros.

Ante este difícil contexto, los ingresos de explotación de Iberia descendieron el 4,4% al pasar de los 1.098,1 millones a 1.049,3 millones del presente ejercicio, situándose los obtenidos por pasaje en 789,2 millones de euros, un 5,3% menos frente a los 833,6 millones del año anterior. Pese a este descenso, Iberia indica en el comunicado que el tráfico de negocios se está restableciendo gradualmente en los sectores de largo radio y medio radio internacional. En este apartado, la evolución de los ingresos en el primer trimestre fue mejor que en los vuelos domésticos. La aerolínea afirmó al presentar las pérdidas de 281 millones de 2009 que confía en cerrar en positivo el año.

El número total de pasajeros por kilómetro transportados (PKT) disminuyó un 1,2% respecto al primer trimestre del año anterior, manteniéndose el coeficiente de ocupación en el 80,8%, mientras que los asientos por kilómetro ofertados (AKO) bajaron un 6,6%. Así, los ingresos medidos por PKT cayeron un 1,9%, mientras que la facturación por AKO aumentó un 3,7%.

En el lado contrario, el recorte en un 9,7% de los gastos de explotación hasta los 1.124,7 millones de euros ha permitido reducir las pérdidas. La mitad correspondió, según la compañía, al coste del combustible y el resto a los ajustes de capacidad y a las medidas de ahorro, también de carburante al reducir la capacidad de los aviones. Otros gastos de las operaciones, como el alquiler de flota, las tasas de navegación y el sistema de reservas, entre otros, descendieron el 8,9%, al alcanzar los 481,4 millones de euros.

Los gastos de personal, que representaron el 26,2% del total, disminuyeron un 3,8% con relación al primer trimestre de 2009, en el caso de la partida que afecta a la plantilla el tijeretazo llegó al 5,2%. A 31 de marzo la compañía, que ha reducido flota y revisado su plan de inversiones ante la complicada situación del sector, mantuvo una sólida posición patrimonial (1.587,8 millones de euros), e incrementó el saldo disponible un 5,8% hasta 2.030,5 millones. También redujo el endeudamiento neto ajustado el 13,7%.