La tarjetas de débito suben un 7,9% en 2009 y las de crédito un 6,5%

Los bancos y cajas de ahorros españoles elevaron las comisiones que cobran cada año a sus clientes por tener tarjetas de débito un 7,9% de media en 2009 y un 6,5 por ciento de media en su modalidad de crédito, según datos del Banco de España. De esta forma, la cuota anual aproximada que pagaron el año pasado los clientes de las entidades financieras por sus tarjetas de débito se situó en 16,66 euros y ascendió a 33,30 euros para las de crédito.

Sin embargo, no todas las entidades aplican los mismos precios a sus clientes, con lo que hay grandes diferencias entre las comisiones máximas aplicadas por una tarjeta de débito (25 euros) y la mínima (4,51 euros). Lo mismo ocurrió con las de crédito, ya que las comisiones máximas se situaron en 47 euros y las mínimas en 13,52 euros.

Los bancos y cajas que operan en España no sólo elevaron las comisiones en 2009, sino que también encarecieron la retirada de efectivo en los cajeros automáticos. Por eso, aunque continúa siendo gratis disponer de efectivo con una tarjeta de débito en los terminales de la propia entidad, hacerlo en los de otra compañía de la misma red costó el año pasado una media de 1,08 euros, frente a los 1,07 euros de un año antes. Si el cajero del que se retira el dinero es de otra red, la comisión media aplicada se situó en 3,72 euros en 2009, lo mismo que se cobró de media en cajeros ubicados en el extranjero.

Al tiempo que elevan las comisiones al consumidor, los bancos y las cajas de ahorros en España las reducen al comercio. De hecho, sostienen que han dejado de ingresar 3.500 millones de euros en los últimos cinco años por la rebaja de las comisiones que han aplicado a los comercios por el uso de las tarjetas de pago. En España, los consumidores abonan en la actualidad cerca del 40% de las transacciones comerciales mediante tarjeta de pago y el 16,5% del gasto familiar se hace a través de tarjetas, porcentaje inferior el registrado en Reino Unido y Francia (35%).