Zapatero descarta abaratar el despido pero defiende más flexibilidad laboral

Con el clamor empresarial por una reforma laboral cada vez más intenso, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha descartado cualquier modificación de las reglas de juego que sirva para "abaratar el despido" o "pérdidas de derechos" de los trabajadores, pero sí ha defendido "una adaptación de las empresas y los trabajadores en la que la flexibilidad interna será fundamental" para lograr un nuevo modelo productivo y económico en España. Por ello, ha añadido que algunos cambios en la negociación colectiva pueden resultar "positivos".

Zapatero ha marcado su posición este mediodía en la sede del Círculo de Economía, momentos antes de almorzar con la crema del empresariado catalán, en línea con la manifestada hace unos días por el presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, que también pidió algunas modificaciones en la negociación colectivas sin hablar abiertamente de una gran reforma laboral. "Si la reforma laboral sirve sólo para restar protección social, la vamos a rechazar", apuntó.

Preguntado por las negociaciones sobre un nuevo modelo de financiación autonómico, el presidente ha asegurado que se están produciendo "avances" para alcanzar un acuerdo definitivo antes del 15 de julio, que dará lugar al "mejor sistema de financiación de la historia".

El Consejo Económico y Social pide cambios graduales en el mercado de trabajo

El presidente del Consejo Económico y Social (CES, órgano consultivo del Gobierno),Marcos Peña, ha considerado hoy que en el actual momento de crisis económica deben acometerse cambios graduales en el mercado laboral, en lugar de esperar a una "gran reforma". Así lo manifestó Peña durante la presentación de la Memoria sobre la situación socioeconómica y laboral de España en 2008, elaborada por el CES, donde ha asegurado que ahora el clima entre sindicatos y patronal es "más optimista", por lo que ha augurado un acuerdo entre los agentes sociales antes de agosto.