Quintás advierte que la morosidad en las cajas de ahorros se duplicará hasta el 3% en 2009

Tras un 2007 "realmente feliz", en el que las cajas han alcanzado un "récord histórico de beneficios", el sector afronta la desaceleración con cierto optimismo por su condición de "primer agente financiero" en el que cree que es "el mejor sistema bancario del mundo", según ha resaltado hoy el presidente de la Confederación Española de las Cajas de Ahorros (CECA), Juan Ramón Quintás. Fruto de este deterioro del negocio hipotecario y la subida del Euríbor, Quintás ha advertido que la morosidad en el sector alcanzará el 3% en 2009, lo que supone más que duplicar la tasa actual, que se sitúa en el entorno del 1,28% tras el fuerte repunte registrado desde finales de 2007.

En este futuro a medio plazo, Quintás ha valorado en relación a la creciente tendencia de estas entidades por salir a Bolsa a través de sociedades participadas o mediante la emisión de cuotas participativas que "más de una caja seguirá el camino" para ampliar sus recursos propios, tal y como anunció ayer el Consejo de Administración de Caja Mediterráneo.

El director de la Oficina Económica del Presidente ha advertido que el sistema financiero deberá acostumbrarse a vivir con menor liquidez y con mayores riesgos.

No obstante, el presidente de CECA no ha querido desaprovechar su intervención en el Foro de la Nueva Economía para criticar las "exageradas" las primas que las entidades financieras están pagando por las últimas emisiones realizadas, ya que son diez veces superiores a las que se efectuaban hace un año, pero confió en que los precios se normalicen en los próximos dos o tres meses, evitando así un trasladado de ese encareimiento a sus clientes.

Volviendo al balance de 2007, Quintás ha señalado que en el último año las reservas propias y de capital de las cajas han aumentado de forma "extraordinaria", un 21,7%, respecto a 2006, gracias a la inyección de unos 10.000 millones de euros.

El presidente de la CECA ha elogiado también que las cajas hayan aprovechado durante años sus beneficios para "blindarse" ante futuras turbulencias del mercado, así como el "notable" fortalecimiento de su solvencia.

Además, Quintás ha asegurado que "firmaba" para que las cajas de ahorros repitieran este año los beneficios que obtuvieron en 2007, un periodo "verdaderamente feliz" en el que, a pesar del estallido de la crisis subprime, se alcanzó la eficiencia media de rentabilidad del sistema.

Quintás, para quien la avaricia es "difícilmente compatible con la ética", ha lamentado el "fallo monumental" de la disciplina del mercado que ha llevado a la situación actual del sistema financiero. Así, ha recordado que la banca "fuera de nuestras fronteras" ha declarado pérdidas en los últimos nueve meses por más de 325.000 millones de dólares.

Menos liquidez y más riesgos

En este sentido, el director de la Oficina Económica del Presidente del Gobierno, Javier Vallés, ha afirmado hoy durante el mismo acto que el Ejecutivo cree que, una vez pasen las turbulencias que afectan a la economía, el sistema financiero deberá acostumbrarse a vivir con menor liquidez y con mayores riesgos.

Vallés ha señalado que, "sin duda, en el futuro tendremos que convivir con menores niveles de liquidez y mayores tasas de riesgo que las que hemos vivido en años anteriores".

No obstante, el sustituto de David Taguas al frente del brazo derecho económico del presidente Zapatero no ha aclarado si el Ejecutivo considera que esas turbulencias ya han tocado fondo. "Los últimos datos son favorables, si esta situación positiva persiste, ayudará a dar liquidez a los balances bancarios y a mejorar las expectativas macroeconómicas globales", se ha limitado a señalar.

Asimismo, ha asegurado que el origen de la desaceleración "está más en una falta de confianza de los hogares". Una situación que, en su opinión, está "muy ligada al deterioro del sector de la vivienda y al endurecimiento de las condiciones financieras".

Vallés ha subrayado también que el sector de la construcción está viviendo "un proceso natural tras crecimientos con tasas de construcción de viviendas que muchos calificaban de insostenibles".