Apedreado un autobús con niños en una huelga de transporte de viajeros en Sevilla
El director de la compañía Casal denuncia que 16 vehículos han sufrido sabotajes
La huelga de cinco días convocada por el comité de empresa y la asamblea de trabajadores de la compañía de transporte de viajeros Casal, que explota diversas conexiones de Transportes Urbanos de Sevilla (Tussam) y del Consorcio de Transportes del Área Metropolitana, ha derivado en una "guerra de guerrillas" en la que 16 autobuses han sido atacados. Un piquete ha llegado a apedrear un autobús escolar con niños, según la empresa.
El director de Casal, Luis Martín, ha explicado que sólo esta mañana la empresa ha contado 16 autobuses "saboteados", con las correas de los motores cortadas o cristales rotos con "pedradas y balínes". Martín ha destacado que los autobuses fueron atacados poco antes de despuntar el alba a través de "verdaderas técnicas de guerra de guerrillas".
Al margen de los "serios problemas" que, ha reconocido, afronta la empresa para hacer cumplir los servicios mínimos, que incluyen los vinculados con la actividad escolar, el director de Casal ha lamentado el episodio vivido en Sevilla Este, donde un transporte escolar de un colegio privado recibió el impacto de una piedra en una de sus ventanillas pese a estar cargado de menores de edad. "No ha sido una escena bonita, con niños llorando", ha contado el director de la empresa en la cadena SER.
Denunciado a la policía
"Los niños se han asustado, hay mucha peligrosidad en estas prácticas", ha alertado el director de Casal, quien ha denunciado el caso al Cuerpo Nacional de Policía y a la Subdelegación del Gobierno.
Este responsable ha criticado la huelga, que, en su opinión, está "al margen del sistema". "No conocemos las causas concretas de esta huelga, no hay reivindicaciones específicas".
Paran 195 trabajadores
La convocatoria de huelga se mantiene hasta el viernes y afecta a los 195 trabajadores de la compañía en Sevilla. Los servicios mínimos establecidos son del 50% en las líneas urbanas en las horas punta. En cuanto a las líneas interurbanas, se aplican unos servicios mínimos del 25%.
Las principales reivindicaciones de los trabajadores son "mejoras laborales" y una mejora "sustancial" de la seguridad en los vehículos de la flota.
