El Gobierno británico nacionaliza el banco Northern Rock
El anuncio causa sorpresa entre los expertos
El Gobierno británico nacionalizará el banco Northern Rock tras no prosperar las ofertas de reflote de la institución, sumida en una crisis crediticia, según ha informado el ministro de Economía, Alistair Darling.
Darling ha señalado a través de un comunicado que ninguna de las dos ofertas privadas por el banco reunían "suficiente valor para los accionistas" y ha resaltado que la medida cumple "nuestro objetivo de proteger los intereses de los contribuyentes".
El Gobierno presentará la correspondiente legislación de urgencia en el Parlamento y mañana dará a conocer un comunicado sobre esta decisión en la Cámara de los Comunes.
En el comunicado, Darling puntualiza que la Autoridad de Servicios Financieros, regulador del sector, le informó de que el banco es solvente y de que los libros contables están en orden.
El ex director ejecutivo de la aseguradora Lloyd''s of London Ron Sandler será el encargado de administrar el banco, cuya sede está en la ciudad de Newcastle (noreste de Inglaterra).
Con esta decisión, el Northern Rock se convierte en la primera institución que es nacionalizada desde la década de 1970.
Sorpresa
El anuncio ha sido recibido con gran sorpresa por los expertos, que esperaban que cualquier decisión se diera a conocer través de un comunicado mañana en la Bolsa de Valores de Londres o ante la Cámara de los Comunes del Parlamento.
El Gobierno negociaba con el Grupo Virgin, propiedad del empresario Richard Branson, para alcanzar un acuerdo sobre el Northern Rock, que adeuda al Banco de Inglaterra unos 24.000 millones de libras (más de 32.000 millones de euros) prestados el año pasado para evitar su quiebra.
El Grupo Virgin era el favorito en la batalla por la institución bancaria, pero tenía que mejorar su oferta.
Tanto la oferta de Virgin como la del actual equipo de dirección del Northern Rock, que también pujaba por el banco, no eran vistas como suficientes por el Gobierno para sacarlo adelante.
Primera víctima
El pasado 21 de enero, el Gobierno anunció un plan financiero, elaborado por Goldman Sachs, consistente en convertir el préstamo del Banco de Inglaterra en bonos garantizados por la Administración británica para estimular la venta del banco y el pago de la deuda.
El pasado 4 de febrero, el Grupo Virgin y el consorcio liderado por la dirección del Northern Rock presentaron sus respectivas propuestas, mientras que otro comprador potencial, Olivant, se retiró del concurso en el último momento.
Según los medios británicos, ninguna de las ofertas que estaban sobre la mesa cumplían las expectativas del Gobierno, que al parecer buscaba una proporción mayor del beneficio de la venta de los bonos como compensación a la garantía que concedía.
La oferta del Grupo Virgin, según los medios, consistía en dar una inyección de capital al banco de 1.300 millones de libras, de los cuales 500 se recaudarían mediante una oferta a los actuales accionistas para que compraran nuevas acciones.
En tanto, el consorcio encabezado por la directiva quería transformar el negocio con la venta y reorganización de sus activos.
El primer ministro británico, Gordon Brown, se mostraba dispuesto a nacionalizar el banco si no llegaba a ningún acuerdo con el sector privado, de acuerdo con la prensa económica.
De haber prosperado la oferta del Grupo Virgin, ésta debía ser enviada a Bruselas para que le diera el visto bueno a fin de asegurar que no se violaba ninguna regla sobre ayuda estatal.
El Northern Rock es la primera víctima en el Reino Unido de la crisis crediticia mundial provocada por la caída de las hipotecas de alto riesgo en Estados Unidos.
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