El sueldo de los españoles triplicaba el de los inmigrantes en 2002

Los trabajadores inmigrantes que trabajan en España, con excepción de los comunitarios y norteamericanos, reciben un salario entre un 25% y un 35% inferior a la media de los españoles, según la Encuesta de Estructura Salarial de 2002, hecha pública hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Mientras el salario bruto medio anual de los españoles se quedó en 19.800 euros en 2002, el de los asiáticos fue de 14.739 euros (un 25,58% inferior), el de los africanos de 13.317 (32,76% menos), el de los sudamericanos y centroamericanos se situó en 12.953 euros (34,6% más bajo) y el de los europeos no comunitarios en 13.522 (un 31,73% menor). Por el contrario, el de los trabajadores de América del Norte residentes en España ascendió a 30.339 euros al año, un 50% más, y el de los extranjeros procedentes de la UE se situó en 19.972 euros, al nivel de de los españoles.

El INE fija el salario bruto medio anual de los estos últimos en 2002 en 19.808 euros, si bien entre el 10% de los asalariados ganan el 27,6% de la masa salarial total. Por el contrario, el 20% de los trabajadores con salarios más bajos sólo dispone del 7% de la renta total, con lo que el salario "más frecuente", según el INE, se situó en 2002 en los 12.500 euros anuales.

El femenino, el 71% del masculino

Teniendo en cuenta el sexo, en 2002, los hombres españoles ganaron una media de 22.174,08 euros, mientras que las mujeres se quedaron en los 15.775,07 euros de media. Con estos datos, el salario promedio anual femenino es el 71,1% del masculino, si bien el INE aclara que se debe a las diferencias registradas por sexos en tipo de contrato, jornada, ocupación o antigüedad.

Precisamente, considerando las diferencias salariales por tipo de jornada, se observa que la desigualdad entre hombres y mujeres disminuye notablemente si se tiene en cuenta esta variable, dado que el número de mujeres trabajando a tiempo parcial es muy superior al de varones.

De hecho, el INE ha hecho una comparativa concreta en grupos con el mismo tipo de trabajo y las mismas condiciones de antigüedad o categoría y ha concluido que "cuando se analizan grupos de trabajadores con características laborales e individuales homogéneas, la discriminación salarial disminuye".

Sin embargo, reconoce que estas diferencias salariales se producen en todos los sectores productivos si bien en el sector educativo es donde los salarios están más cercanos. Lo mismo ocurre si se toma como referencia las ocupaciones, en las que las mujeres también cobran menos.

El INE ha realizado también una comparación de salarios por tipos de contrato, principalmente, fijo y temporal, y llega a la conclusión de que los temporales tienen un salario medio anual inferior en un 40% al de los contratados indefinidos.

Nivel de estudios

El INE pone de manifiesto también "grandes diferencias" salariales por tipo de actividad económica. Así, mientras los profesionales de la intermediación financiera sitúan su salario medio en 37.321,1 (un 88,4% por encima de la media), quienes trabajan en la hostelería tienen un salario medio de 13.177 euros, un 33,5% por debajo de la renta media.

La industria, los servicios de transporte, intermediación financiera y sanidad tienen salarios por encima de la media mientras que la construcción, comercio, hostelería, servicios empresariales, educación y servicios personales los tienen inferiores.

Por nivel de estudios, el salario anual crece a medida que aumenta la cualificación. Los trabajadores sin estudios o que no han completado la Educación Primaria tienen una remuneración inferior en un 35% al salario medio, mientras que los licenciados universitarios perciben un salario anual casi un 67% superior.

A partir del segundo ciclo de secundaria o formación profesional la remuneración es superior al salario medio. Sin embargo, tener primaria terminada o haber realizado el primer ciclo de educación secundaria apenas da lugar a diferencias en el nivel salarial.

Finalmente, el estudio realiza la tradicional comparación por comunidades autónomas, de manera que los que más ganaron de media en 2002 fueron los madrileños (23.182 euros), seguidos de los vascos (22.901), los navarros (20.975) y los catalanes (20.730). En el lado contrario se situaron los extremeños (16.401 euros), los murcianos (16.529) y los castellano-manchegos (16.692).