El Gobierno aprueba los 2.515 despidos de Iberia pero cuestiona las 207 bajas de pilotos

La Dirección General de Trabajo ha emitido una resolución en la que aprueba parcialmente la petición de la compañía aérea Iberia de extinguir 2.515 empleos de los que 207 son pilotos, según ha informado el Ministerio de Trabajo.

La resolución, que mantiene las condiciones de regulación de empleo pactadas por la compañía con todos los colectivos de trabajadores, extiende esas medidas a los pilotos, de manera que establece que las extinciones de contrato sean voluntarias y no forzosas.

Así, en todos los casos las bajas serán voluntarias, según las fórmulas recogidas en el Plan Social y de Acompañamiento propuesto por Iberia, es decir, se harán a base de prejubilaciones, bajas incentivadas, extinción de contratos por un mínimo con garantía de reincorporación y reducción temporal de tiempo de trabajo, según ha informado la compañía.

El dictamen autoriza las actuaciones de carácter voluntario acordadas y entiende que en la situación de disminución del tráfico aéreo producida tras el 11 de septiembre, concurren causas que "justifican la aplicación de estas medidas de reducción de la actividad laboral también para los pilotos".

Sin embargo, en lo que respecta a la suspensión temporal de contratos solicitada por Iberia para los pilotos -de dos meses al año-, la Dirección de Trabajo entiende que la compañía no ha acreditado las "razones organizativas que justificarían esta medida".

El dictamen precisa que, en todo caso, las razones esgrimidas por Iberia para la suspensión de contratos deberían ser examinadas en otro expediente de regulación de empleo, una vez que "la resolución se ponga en práctica", según el Ministerio.

Negativa del SEPLA

El pasado 14 de noviembre, Iberia presentó a los sindicatos de los colectivos afectados un expediente de regulación de empleo para 2.515 empleados, el 8,6% de los 29.124 que integran la plantilla del Grupo Iberia.

De esos 2.515 empleados, 1.775 son trabajadores de tierra, 520 son tripulantes de cabina de pasajeros, 13 son oficiales técnicos de a bordo y 207 son pilotos.

Un mes después, Iberia pactó las condiciones de la regulación de empleo con el 90% de los afectados, con la única excepción del SEPLA, el sindicato que representa a los pilotos.

Tras romper las negociaciones con el SEPLA, Iberia presentó el pasado 17 de noviembre a la Dirección de Trabajo su propuesta de expediente de regulación de empleo con el fin de que ese organismo resolviera el conflicto.

Durante la negociación con los pilotos, el SEPLA denunció que las medidas de ajuste de plantilla eran contrarias a los compromisos asumidos por Iberia en el convenio colectivo, y ante las dificultades de llegar al acuerdo, el sindicato de pilotos propuso a la dirección de la compañía seguir negociando con un árbitro o mediador.

En ese sentido, la resolución de la Dirección General de Trabajo considera que se trata de una "cuestión de interpretación de convenio que no puede ser resuelta por la Administración, sino por fórmulas como la mediación, el arbitraje o una sentencia judicial".