El PSC busca marcar perfil ante el PSOE tras la derrota de Chacón

"El PSC está pasando su duelo", en expresión de un dirigente del partido, pero no quiere emplear más tiempo en seguir lamentando la derrota de Carme Chacón como candidata a la secretaría general del PSOE. Es momento de pasar página y, sobre todo, de marcar perfil propio ante el partido hermano sin demora. Y para ello nada mejor que hacer cumplir las resoluciones del congreso del PSC celebrado en diciembre.

Ese es el análisis que hizo ayer la ejecutiva de los socialistas catalanes después de que Alfredo Pérez Rubalcaba se alzara con el liderazgo del PSOE. "El nuevo PSC será más PSC que nunca", anunció a la prensa el portavoz del partido, Jaume Collboni. Y esa postura no tiene nada que ver con el resultado del congreso, añadió.

El perfil propio que quieren marcar los socialistas catalanes pasa por revisar "sin prisa, pero sin pausa", el pacto de relaciones con el PSOE que se estableció tras la creación del PSC. No hay fecha para iniciar las conversaciones, pero el PSC cree que tiene "las manos libres" para hablarle de tú a tú al PSOE y que, llegado el caso, sus diputados en el Congreso puedan votar distinto en cuestiones que afecten a la autonomía catalana. Esta posición del PSC llega no exenta de tensiones, que ayer se visualizaron en la rectificación que tuvo que hacer José Zaragoza, exsecretario de organización, quien inicialmente abogó por marcar perfil frente al PSOE y luego matizó sus palabras para evitar que en Madrid se interpretara esta opción como consecuencia de la derrota de Chacón.

"Compañero Rubalcaba"

El 12º congreso del PSC aprobó que el replanteamiento de las relaciones con el PSOE se estudiaría en una comisión conjunta de ambos partidos. Collboni recordó ayer que el resultado del congreso del PSOE "ha sido equilibrado y ha acabado con algunos mitos de los nacionalismos de uno y otro lado acerca de las posibilidades que existían sobre la capacidad de liderazgo en el PSOE por ser catalán". En varias ocasiones se refirió al "compañero Rubalcaba" y confió en que exista "lealtad mutua".

A diferencia de lo que ocurrió en una ejecutiva anterior, en la que surgieron críticas a la dirección por haber avalado sin fisuras la candidatura de Carme Chacón para liderar el PSOE, ayer no se recriminó esa apuesta. Como tampoco hubo intervenciones que recriminaran el triunfo de Rubalcaba. En ese intento de marcar perfil propio, la ejecutiva del PSC analizó también el pacto fiscal. Fue Àngel Ros, alcalde de Lleida, quien planteó el tema invocando la necesidad de ocuparse de los problemas reales que afectan a los ciudadanos y de poner ese tema en la agenda política de los socialistas para evitar que CiU siga haciendo bandera de él.

Los asistentes se mostraron de acuerdo en que dentro de un año habrá que revisar el actual modelo de financiación, que data de julio de 2009. Los socialistas defienden un modelo federal de pacto fiscal, que nada tiene que ver con el modelo confederal del concierto económico que reclama CiU. Durante el proceso precongresual del PSOE, Chacón dijo que se opondría "con uñas y dientes" al pacto fiscal.

Jaume Collboni apremió a CiU a que concrete su pacto fiscal. "Nosotros lo tenemos escrito desde hace años, pero no sabemos si lo que ellos proponen es actualizar el modelo vigente como un paso previo a la transición nacional de la que habla Artur Mas o si ya se lo ha puesto encima de la mesa a Mariano Rajoy", dijo.El exsecretario de Organización del PSC José Zaragoza, podía haber asistido ayer a la reunión de la ejecutiva del PSC, pero no lo hizo. "No me toca ir y ya lo dejé bien claro en el último congreso del PSC. Les toca a otros liderar el proyecto", explicó a EL PAÍS. Zaragoza, actualmente diputado en el Congreso, y Esperança Esteve, también diputada, son los dos representantes del PSC en la ejecutiva federal del PSOE y eso les permite acudir a las del PSC. Esteve, que ya fue elegida integrante de esa ejecutiva en el congreso de los socialistas catalanes, sí acudió a la reunión de ayer.

Zaragoza y Esteve sustituyen a Carme Chacón y Miquel Iceta en ese órgano de dirección del PSOE. Ninguno de los dos acudirá tampoco a las ejecutivas del PSC. Chacón porque ya no ocupa ningún cargo que se lo permita, en aplicación de los estatutos del partido. En el caso de Iceta, no asistirá por deseo propio. La ejecutiva de ayer lo nombró presidente de la Fundación Rafael de Campalans y eso le daría derecho a acudir a las ejecutivas, pero no lo hará para visualizar la nueva etapa del PSC.

Renovada la imagen en la ejecutiva, en la que tampoco está el exprimer secretario José Montilla, queda pendiente el grupo parlamentario. En el PSC se da por seguro que más pronto que tarde serán sustituidos el presidente, Joaquim Nadal, y el portavoz, Miquel Iceta.