Trias retira el proyecto de Can Batlló un día después de presentarlo

El gobierno de Xavier Trias (CiU) tomó ayer de la misma medicina que en repetidas ocasiones utilizó en la oposición para atragantar a los socialistas. El área de Urbanismo del Ayuntamiento, a cargo de Antoni Vives, se vio obligada a retirar del orden del día de la comisión de hábitat urbano la aprobación del proyecto urbanístico para desencallar Can Batlló, en el distrito de Sants-Montjuïc, y evitar así perder su primera votación clave. El miércoles, Vives había anunciado el acuerdo, a pesar de no haber negociado el respaldo de los otros grupos.

Para el PSC, el PP e Iniciativa el problema es de forma. Todos creen que es necesario buscar fórmulas para promover una salida al proyecto de la antigua fábrica textil. Sin embargo, rechazaron los términos propuestos por CiU. Y también le pasaron factura por presentar como seguro algo que tenía que ser debatido.

Vives explicó el miércoles que Immogaudir -actual promotor- recibiría del Ayuntamiento 10 millones de euros para pagar las indemnizaciones. La ciudad recibiría más de 5.000 metros cuadrados para construir pisos protegidos y una finca de 16.000 en Horta- Guinardó, cerca del parque de los Tres Turons.

Sin embargo, el orden del día de la comisión añadía nuevos términos. La oposición asegura que esa finca cuesta más de 22 millones de euros, por lo que desencallar Can Batlló costaría en realidad 35 millones. Una portavoz explicó que el Consistorio no daría el dinero a Immogaudir, sino que asumiría la urbanización de la zona, con vistas a 2018. "No pueden explicar solo un trozo y deben saber que cualquier punto que dictaminar debe tener mayoría", aseguró la portavoz del PSC, Assumpta Escarp.

CiU intentó convencer al PP para que apoyara el proyecto, sin éxito. El concejal popular Eduardo Bolaños aseguró: "Se habló de 10 millones de inversión y eso no es lo que se aprobaba hoy. Tenemos que hablar más". Los ecosocialistas recalcaron que Can Battló "no se debe impulsar a cualquier precio".