Bizkaia se queda hoy sin mataderos
Sanidad cierra el centro de sacrificio de Durango por suponer un "riesgo para la salud pública" - Sus 3.000 clientes deberán desplazarse a Gipuzkoa y Álava
El cierre del matadero de Durango, previsto para hoy, encierra "graves" consecuencias, según denuncian la sociedad privada que lo gestiona, Erralde, y el sindicato agrario ENHE. Y es que la apertura del nuevo centro de sacrificio, ubicado en Berriz, no está previsto hasta 2014, por lo que Bizkaia se quedará sin mataderos operativos durante dos años. Pasará a depender de Gipuzkoa y Álava. El proceso que ha culminado con la clausura del centro se inició el pasado 7 de diciembre con un informe desfavorable del departamento de Sanidad que detectó defectos estructurales en el local e irregularidades en el mantenimiento de las cuadras y los procedimientos de matanza y faenado de los animales y la carne. El Gobierno vasco concluyó que existía un "riesgo para la salud pública" en una resolución reciente.
Los costes del porte se elevarán mucho y "habrá ganaderos que maten en casa"
Los responsables del matadero acogieron estas advertencias, subsanadas, según ENHE, ya al 80%, aunque Sanidad no lo ve así. En cualquier caso, Erralde se ha puesto en marcha para reparar todos los problemas señalados por el Ejecutivo vasco y esperan poder reabrir el centro en "un mes". La polémica en torno al asunto se centra en que Sanidad reitera que el proyecto gestado como alternativa a Durango, en Berriz, ya se planteó en 2007 como "única alternativa" y aún no se dispone siquiera de un "proyecto constructivo" ni de la "financiación necesaria" para acometerlo. La sociedad Erralde y ENHE han pedido una moratoria que retrase un cierre que califican de "ilógico", dado que "prácticamente todas las deficiencias están subsanadas" y que el pasado 13 de diciembre el Ejecutivo vasco concedió una subvención a Erralde para solventar dichos defectos. Los gestores del centro sostienen que los terrenos de Berriz estarán listos en unos cuatro meses porque deben permanecer en reposo tras haber sido sellados por ocupar parte de un antiguo vertedero.
El matadero de Durango, que ya acogió unas 200 cabezas extra de ganado tras el cierre del matadero de Zorroza en abril de 2010, es el único en Bizkaia. Su clausura deja en el aire cuestiones decisivas y acarrea graves consecuencias económicas para los 3.000 clientes del negocio -entre ellos, unas 350 carnicerías-. En principio, los sacrificios se realizarán donde decidan los ganaderos. Entre las opciones, de las que los ganaderos no quieren ni hablar por los "elevados costes" de transporte que el cambio acarrearía, está Urkaiko en Zestoa y Mafrido en Donostia, el matadero de Tolosa y el de Llodio. Todas estas plantas tienen, en principio, capacidad para sacrificar más reses de las que manejan en la actualidad. "Además del gran encarecimiento de los costes, supondría una deslocalización de la actividad y llevaría a muchos a matar en sus casas, con el riesgo sanitario que eso implica", explica el portavoz de ENHE, Unzalu Salterain. Y es que un 20% de la actividad de Durango está destinada al autoconsumo, según datos de las centrales. Asimismo, el sindicato duda de que sea posible volcar el trabajo que suponen las 10.000 cabezas de ganado que Durango sacrifica al año sobre otros centros sin saturarlos. Salterain recuerda que el cierre temporal del matadero en 2005 costó tres millones de euros, un 40% del coste del futuro matadero de Berriz.
El presidente de Erralde, Mikel Ansotegi, subraya, por su parte, que el recorrido entre la cuadra, el matadero y la carnicería debe ser lo "más corto posible". Ansotegi reclama una mayor implicación de las instituciones públicas, ya que en este problema afecta a "toda Bizkaia". El 95% de la producción del matadero se destina a la propia provincia. "No es lógico que Gipuzkoa tenga cuatro centros y Bizkaia ninguno, aunque solo sea por el volumen de población de un territorio y otro", dice el máximo responsable de Erralde. De consumarse el cierre, "sería un golpe terrible para la provincia" y 18 personas perderán su trabajo.
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