El coche americano mira a Europa
El mercado estadounidense se parece cada vez más al europeo - Triunfan los modelos compactos y los motores pequeños - Los híbridos y los deportivos, estrellas de la muestra
Detroit recupera la sonrisa. Por primera vez en lo que va de siglo, el salón de la histórica capital del motor presenta un ambiente positivo y optimista. El secretario de Estado para el Transporte, Ray LaHood, lo definía con claridad en su visita a la muestra: "Hace tres años esto era un funeral y ahora parece una boda".
Entonces, en 2009, la Administración de Obama tenía que rescatar de la quiebra a General Motors y Chrysler, mientras Ford contenía el aliento al borde del precipicio para no pedir ayuda con una deuda de 33.600 millones de dólares, que se ha reducido ya a 12.700. Pero para salir del pozo, los tres gigantes han tenido que reinventarse y apostar por coches más pequeños y eficientes.
Según declaró a este periódico James D. Farley, vicepresidente mundial de Ventas y Marketing de Ford, "los norteamericanos ya no quieren coches grandes con motores V6 y V8. Ahora buscan modelos compactos con motores de cuatro cilindros, como los europeos, que gasten y contaminen menos. Y es lo que estamos haciendo". Esta convergencia entre los gustos a ambos lados del Atlántico ha sido clave en la resurrección de la industria norteamericana, porque les permite fabricar modelos globales con tiradas masivas que reducen los costes y mejoran su competitividad. La fiebre de racionalidad se confirma con otros datos: el Coche del Año 2012 en Norteamérica ha sido el Hyundai Elantra, una berlina compacta, y el título de Todoterreno del Año se lo ha adjudicado el Range Rover Evoque, un 4x4 de solo 4,3 metros. Pero ha habido también otro factor clave en la recuperación: la crisis de las marcas japonesas, agudizada después por el terremoto de Japón.
Por último, la recuperación de las ventas del mercado local ha cerrado el círculo virtuoso: de los 10,4 millones de coches de 2009 se ha pasado a 12,8 en 2011, y la previsión para 2012 se sitúa entre 13,3 y 15 millones. En realidad, el único nubarrón que hay ahora es el mercado europeo, que parece profundizar en la recesión.
Sin embargo, los estrenos de Detroit de este año no reflejan bien la nueva situación. Y es que en el sector del automóvil mandan los ciclos de vida de los modelos y ahora tocaba renovar varios deportivos, que se reparten el protagonismo en la muestra con los últimos híbridos. Resalta el Lexus LF-LC, un cupé de 2+2 plazas y mecánica híbrida que podría convertirse en un nuevo deportivo de tamaño medio.
PROTAGONISTAS
Toyota estrena traje
El NS4 anticipa el diseño que Toyota aplicará a partir de 2014. Podría adelantar la imagen del futuro Prius, y ensaya una nueva mecánica híbrida con más prestaciones y autonomía.
Enchufable y 4x4
Volvo convierte al XC60 en un todoterreno híbrido enchufable. Combina un motor turbo de gasolina (280 CV) y otro eléctrico (70 CV). Rinde 350 CV, gasta 2,3 litros de media y saldrá en 2014.
Ligereza
El nuevo SL tiene chasis de aluminio y pesa casi 150 kilos menos. Recoge los últimos avances en confort y seguridad y llegará en marzo con dos motores: 306 y 429 CV. Desde 100.500 euros.
Potencia eficiente
La variante descapotable del nuevo 911 llegará en marzo en versiones Carrera, con 349 CV (113.000 euros ), y Carrera S de 400 CV (130.000). Y gasta mucho menos: desde 8,2 litros.
Híbrido turbodiésel
El primer híbrido diésel de Mercedes reúne el motor 2.2 CDi de 204 CV y un eléctrico de 27 CV. Suma 231 CV, consume 4,2 litros y puede recorrer dos kilómetros con las baterías. Sale en verano.
Un Mondeo más avanzado
Ford ha presentado en Detroit el Fusion, gemelo del Mondeo europeo. La cuarta generación de esta berlina se lanzará en España a mitad de 2013. Aparte de una línea más deportiva, que incluye un frontal inspirado en Aston Martin, añade un interior más elegante y elaborado. Contará también con los nuevos motores Ecoboost de gasolina con turbo, los turbodiésel TDCi y dos variantes más con apoyo eléctrico, una híbrida (HEV) y otra híbrida enchufable (PHEV). La primera llevará un motor 2.0 y otro eléctrico con las mismas baterías que utilizarán los C-Max híbridos que se fabricarán en Valencia. Ford anuncia un consumo de cinco litros en ciudad y 5,3 en autopista. Tendrá un sobrecoste de unos 2.500 euros frente al modelo equivalente con motor convencional. Del Mondeo PHEV, por su parte, se espera que gaste menos de cuatro litros.
Eléctricos con gancho
Solo dos estrenos de modelos eléctricos puros en Detroit y los dos prototipos, aunque con gancho. El más llamativo es el VW E-Bugster, una versión biplaza basada en el nuevo Beetle que confirma las casi infinitas interpretaciones posibles del escarabajo. Destaca por su línea deportiva e incorpora un parabrisas más inclinado y un techo nueve centímetros más bajo. Y como es también tres centímetros más ancho, presenta una silueta más atlética y musculosa. Esta versión lleva unas baterías de iones de litio con 28,3 kWh de capacidad que alimentan un motor eléctrico de 115 CV y permiten recorrer hasta 180 kilómetros en ciudad. Además, acelera de 0 a 100 km/h en 10,9 segundos. No se ha confirmado su producción.
La otra propuesta es el Smart for-us, una versión pick up (camioneta con caja de carga separada) del urbanita de Mercedes. Este guiño a los clientes norteamericanos mantiene las dos plazas, pero se alarga casi un metro por detrás (mide 3,54 de largo) para poder integrar una caja de 90 centímetros que permite llevar dos bicicletas eléctricas diseñadas también por Smart. El objetivo es ofrecer un coche pequeño para desplazarse de casa al centro de la ciudad o al trabajo y seguir luego circulando con las bicis por el casco urbano o por zonas restringidas. Así, incluye un módulo eléctrico que combina un motor de 75 CV y unas pilas de litio de 17,6 kWh. Alcanza 120 km/h y tiene una autonomía de unos 130 kilómetros.
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